El equipo multidisciplinar formado por arqueólogos, historiadores y antropólogos forenses que desde hace una semana excavan en el cementerio municipal de Rubiáns (Vilagarcía) para encontrar la fosa común en la que supuestamente fueron enterradas 18 víctimas de la Guerra Civil, abandonarán los trabajos en pocos días al no haber encontrado restos mortales de los represaliados. Los expertos calculan que de continuar sin novedades, probablemente mañana o el próximo lunes se marcharán del camposanto.
En el entorno del monolito no descubrieron nada, pero esta semana han cambiado de zona (hacia arriba, junto a unos panteones) y han sacado a la luz restos óseos. “El lunes encontramos restos de una amputación en una bolsa y el martes restos de cráneo”, relata uno de los historiadores de Histagra, uno de los grupos -en concreto de la Universidade de Santiago- que participan en este proyecto pionero financiado por el Gobierno central.
Los investigadores están convencidos de que esos huesos son “bastante posteriores” a la fecha de los asesinatos (entre 1936 y 1937), por lo que “está bastante claro que no tienen nada que ver”, afirma Rafael García Ferreira, quien apunta a los años 70 u 80 como posible fecha de los restos hallados.
El historiador explica que el forense ya realizó un estudio sobre el terreno de los mismos y que después realizará uno más exhaustivo ya en el laboratorio.
La excavación ha dejado de realizarse con medios mecánicos y fundamentalmente se está llevando a cabo de un modo manual para tener el mayor cuidado posible con eventuales nuevos restos que puedan aparecer. De ahí que los trabajos vayan ahora más lentos que los primeros días.
Los expertos tienen previsto realizar catas en los pasillos de los nichos para arrojar mayor información a la investigación.
Alumnado del instituto Fermín Bouza Brey visita la prospección
O Faiado da Memoria, la asociación encabezada por Margarita Teijeiro y Antonio Caeiro que investigó en los años 90 sobre la fosa común de Rubiáns y pudo descubrir los nombres y apellidos de las personas asesinadas, ha aprovechado los trabajos de excavación actualmente en marcha para realizar una tarea divulgativa con los centros educativos. Así, tras la visita del pasado lunes por parte de un instituto de Santiago, hoy acudirán al lugar de la excavación los alumnos del IES Fermín Bouza Brey, de Vilagarcía. Los estudiantes irán caminando desde el centro hasta el cementerio municipal. Allí les espera el equipo del que forman parte el antropólogo forense Fernando Serrulla y el arqueólogo Francisco Alonso Toucido.
