En las últimas semanas se han intensificado de manera notable en la comarca los controles policiales de carretera, para tratar de localizar a conductores que puedan circular bajo los efectos del alcohol y/o las drogas.
Y más que se intensificará esa presencia policial, como ya lo hizo con motivo del puente festivo de la Hispanidad, ahora que se acercan celebraciones como la Navidad.
De día o de noche
Pero también otras que son capaces, igualmente, de generar una importante actividad festiva en diferentes localidades de O Salnés y Ullán, como es el caso del San Simón –especialmente en Baión (Vilanova)–, Halloween –con citas destacadas como la de Catoira– y San Martiño, que alcanza gran relevancia en municipios como Meis y O Grove.
Esos controles de carretera que van a implementarse en este último trimestre del año se desarrollan tanto en las principales vías de circulación de O Salnés y Ullán como en las carreteras secundarias existentes a lo largo y ancho de la comarca, y tanto de noche como en cualquier momento del día, tal y como se constató recientemente en la conocida bajada de Lobeira, desde Vilagarcía hacia O Sisto, Baión y Pontearnelas.
El riesgo de avisar
En ese control, realizado a las siete de la tarde, se detectó que algunos conductores que ya habían superado el punto en el que se encontraban los vehículos policiales se dedicaban a advertir a los que circulaban en sentido contrario “haciéndoles luces”, tal y como confirmaron los propios agentes.
Ante esta situación, insisten en apelar a la responsabilidad y el sentido común de todos, tanto pidiendo que no se consuman alcohol o drogas cuando se va a conducir como solicitando que no se alerte sobre la presencia de estos puntos de inspección.
“Tenemos que pensar que al advertir a otros conductores de que hay un control de alcoholemia podemos estar invitando a una persona que conduce totalmente ebria a escaparse por otra carretera donde puede sufrir un accidente grave o incluso matar a alguien, por lo que, con nuestra actitud, estaremos siendo cómplices de ello”, explican los agentes.
Diferentes cuerpos
Y lo hacen tanto en el seno de la Guardia Civil y la Jefatura de Tráfico como en la Policía Local de diferentes villas arousanas, donde también se intensifican los controles de carretera en esta recta final del año.
Unos y otros piden que se extremen las precauciones al volante y que se eviten excesos en fiestas tan señaladas como las que se avecinan.
La comarca ya se prepara para el Samaín
Entre ellas la de Samaín o Halloween, en la que hay que empezar a pensar una vez superado el Pilar, al igual que en celebraciones tan importantes en la comarca como las de San Simón y San Martiño.
En el primer caso ya se empieza a notar el ambiente festivo, sobre todo por la decoración que lucen establecimientos de alimentación y de hostelería, peluquerías y otros muchos negocios.
Las calabazas, que suelen tallarse como si de calaveras se tratara, son uno de los elementos indispensables, al igual que todo tipo de productos u objetos con formas fantasmagóricas que evoquen muerte y sangre.
Donde van a estar muy presentes, un año más, es en Catoira, que una vez superadas las limitaciones por el coronavirus vuelve a organizar su tradicional procesión.
En el Concello explican que "tras el paréntesis del año pasado" ha llegado el momento de retomar la organización de la "Procesión de Caveiras", que alcanza ya su 21 edición.
Aclaran que el desfile tendrá lugar el domingo 31 de octubre con presencia de la Banda de Música de Catoira, "partiendo del pabellón municipal de deportes y regresando al mismo lugar".
Una vez finalizado el recorrido "se repartirán castañas asadas entre los participantes".
En el Concello que dirige Alberto García también anuncian que la Escola Municipal de Teatro "está preparando una serie de cortometrajes de leyendas, miedo y misterio” que se proyectarán en el Auditorio el 5 de noviembre a las 20.30 horas.
