El Concello de O Grove, uno de los pioneros en este ámbito, da nuevos pasos al frente en materia de compostaje. Lo hace, nuevamente, con ayuda de la Diputación de Pontevedra y al abrigo del plan Revitaliza, que tan buenos resultados está dando en esta localidad y otras como Valga.
La concejalía que dirige María de los Ángeles Domínguez Fernández se ocupa del desarrollo de este programa, anunciando ahora que, gracias al ente provincial, está en condiciones de ampliar su programa haciendo frente a los sobrecostes derivados de su puesta en marcha inicial y a la adquisición de cuatro nuevos composteros comunitarios, los cuales “se unen a los diez existentes, ubicados en diferentes lugares del municipio”, explica.
De igual modo, el Concello pudo adquirir una máquina trituradora de biomasa y nueve cajones para el almacenamiento de material estructurante con el que acelerar el proceso de compostaje comunitario.
Al tiempo que dan a conocer estos avances, en la concejalía de Medio Ambiente recuerdan que el sistema habitual de eliminación de residuos conlleva unos costes considerables, tanto para las arcas municipales como para el conjunto del vecindario, de ahí que animen a la población a reciclar y compostar.
Esto último constituye “una forma de gestión de los restos orgánicos mucho más coherente y respetuosa, ya que no solo nos permite evitar la contaminación producida por el transporte y los tratamientos convencionales, sino que, además, obtenemos un abono rico en nutrientes y totalmente natural que podemos emplear en nuestras huertas, jardines y maceteros para obtener cultivos sanos y de calidad”, sentencian en Medio Ambiente.
