La Xunta de Galicia se compromete a llevar a cabo obras de mejora en la estación de autobuses de O Grove, construida en la proximidad de O Corgo, justo en el centro neurálgico de la localidad arousana.
Los trabajos de mejora de las instalaciones cuentan con una asignación de casi cincuenta mil euros, y era una demanda general de los vecinos como consecuencia del abandono a la que se vio sometida en los últimos años.
Explica la Consellería de Infraestruturas que los trabajos propuestos consisten en la limpieza de la cubierta y los canalones, así como la reparación de los servicios que son causantes de filtraciones en el interior.
Asimismo, la empresa se compromete a aplicar un tratamiento anticorrosivo de las superficies metálicas salpicadas por distintas estructuras del inmueble de transportes.
Renovar los aseos públicos
Pero el proyecto de mejora es si cabe más ambicioso en tanto que las obras incluyen la mejora de los aseos y además, en el exterior, la reparación del borde de la dársena de estacionamiento de los autobuses, así como la instalación de un cartel identificativo, explican en fuentes autonómicas.
Recuerdan en la Administración autonómica que la construcción de la estación de autobuses se remonta al mes de junio de 2002, un extenso período en el que fue necesario llevar a cabo otros trabajos y mantenimiento del local construido en dominio de la Dirección Xeral de Costas.
En este momento también se propone llevar a cabo un listado de tareas pendientes para la conservación y mantenimiento de las instalaciones, al objeto de adaptarla a las exigencias de los pasajeros que buscan una línea regular para poder desplazarse desde O Grove.
Son, sin duda, unos trabajos imprescindibles para revitalizar una estación de pueblo pero que en meses como el verano multiplica su población de forma exponencial por lo que ofertar un buen transporte es una exigencia vecinal.
Cierre del edificio
Hace dos o tres meses que usuarios de la estación de buses de O Grove se han quejado del abandono de este edificio, que incluso se vio forzado a cerrar sus puertas para evitar contagios o incrementar el riesgo de infección.
Durante el verano se volvió a prestar servicio desde dichas instalaciones pero en absoluto puede extrañar que en, el caso de que no se inicie la mejora, vuelva a cerrarse al público.
Estas deficiencias fueron mucho más ostensibles antes de la entrada del verano, por lo que en julio y agosto se prestó la mejor atención posible al público.
Los trabajos fueron encargados a la empresa Obras y Viales de Galicia (OVIGA) que pretende iniciar en octubre las susodichas obras.
