Esta semana fueron registradas por parte del grupo municipal de Esquerda Unida (EU) de O Grove una serie de propuestas para mejorar la accesibilidad y seguridad de las personas con movilidad reducida en la próxima Festa do Marisco, que se celebrará entre el 30 de septiembre y el 12 de octubre.
Entre las propuestas de la formación izquierdista se encuentran “como mínimo”, la instalación de “una caja que expenda comida a nivel del suelo”, para que las personas en silla de ruedas o con alguna diversidad funcional en su movilidad puedan ser atendidas con normalidad. De este modo, podrán retirar sus tickets de comida sin la ayuda de nadie.
Además, por lo que pueda pasar, EU solicita que existan trabajadores a disposición de estas personas, que les ayuden en todo momento, sea con la recogida de los platos a los que no son capaces de llegar o con lo que necesiten. Instan también a que exista una versión de las cartas de productos en braille, para que la puedan leer personas con poca o nula visión.
Por último, proponen la instalación de mesas adaptadas para las personas en silla de ruedas, que les sean cómodas para comer, además del acercamiento de los baños, que en la última edición se encontraban detrás de la lonja, muy a desmano para todos y para alguien con dificultades de movilidad, todavía más.
Como otras propuestas, Esquerda Unida solicita que exista un Punto Morado de lucha contra la violencia machista, útil para concienciar a todos y dar cobijo a la mujer que lo precise, así como un refuerzo en la seguridad del evento con ayuda de otros concellos.
Dos años en un cajón
Las propuestas llevan registradas dos años, desde 2019, cuando fueron puestas sobre la mesa del gobierno municipal por primera vez. En esa ocasión, José Antonio Cacabelos, el alcalde, “vio las proposiciones con buenos ojos”, según EU.
De esta manera, en Esquerda Unida “no ven disculpa” que se pueda poner por parte del Concello para no efectuar estas propuestas.
