Garantizar la producción de los bancos marisqueros es una de las funciones más importantes de las cofradías, unos bancos marisqueros que suponen el grueso de los ingresos que entran en un pósito como el de Vilanova de Arousa. Es por ello que la Cofradía ha puesto en marcha un proceso de regeneración del banco de A Negrenla, donde trabajan los mariscadores a flote. Ese proyecto se centra en mejorar la productividad, pero también en tratar de descubrir los problemas de fijación y crecimiento que está encontrando una especie fundamental para el sector, la almeja babosa.
Así, el proyecto, en el que se van a invertir unos 15.000 euros aportados por la Consellería do Mar, consistirá en la adecuación de una amplia zona de A Negrenla en la que se arará con un barco y se oxigenará el terreno por parte de los propios mariscadores. En esa zona se implantarán un total de 900.000 unidades de almeja babosa, a la que s ele realizarán muestreos cada tres meses para analizar su crecimiento y si existen problemas de fijación o no en esa zona y como pueden resolverse. Esos resultados serán fundamentales para el futuro y pueden servir para mejorar la producción de una especie que resulta básica en los ingresos de los mariscadores de Vilanova.
La Cofradía sembrará 900.000 unidades en la zona marisquera de A Negrenla y realizará un seguimiento de su evolución
Si el resultado de los muestreos es positivo, se continuará con el mismo método de regeneración en otras concesiones que emplea la Cofradía de Vilanova.
Los problemas en la fijación de los alevines de la almeja babosa se han detectado en varias cofradías de la ría que, en sus regeneraciones, han optado por sembrar almeja japónica, una especie que se adapta mejor a las dificultades y en la que apenas se registra mortandad. El objetivo en A Negrenla es reforzar la producción y garantizar ingresos a los mariscadores. Esa producción alcanzará talla comercial en el plazo aproximado de dos años. La siembra de la almeja japónica se llevara a cabo durante los meses de agosto y septiembre y, desde el primer momento, se comenzarán a tomar datos sobre su situación.
La de A Negrenla no es la única regeneración que se va a poner en marcha en las próximas semanas. El pósito tiene previsto acometer la siembra de 200.000 unidades de almeja babosa en una zona de As Sinas, una regeneración que se va a acometer durante dos años, con siembras puntuales. Al igual que en A Negrenla se espera que la almeja alcance su talla comercial en el plazo aproximado de dos años.
La de Vilanova se suma así al trabajo que se está realizando en otras entidades próximas, como la Organización de Productores de A Illa (OPP-20), que hace poco más de una semana sembró 1,5 millones de unidades de almeja japónica en bancos del marisqueo a flote. En total, este año la OPP-20 ha sembrado tres millones de estas unidades con el objetivo de que en el plazo de 18 a 24 meses alcance la talla comercial y garanticen los ingresos necesarios de los marineros.
