La Iniciativa Cidadá pola Memoria Histórica de Vilagarcía inaugurará el 10 de julio la cuarta placa de su roteiro “por los lugares de la infamia” y lo hará en el cementerio municipal de Rubiáns, donde están enterradas en una fosa común 19 personas fusiladas durante el franquismo. En la víspera de este acto se celebrará una charla en el Salón García (9 de julio alas 20.30 horas) en la que participarán familiares de las últimas personas asesinadas en la dictadura, el 23 de septiembre de 1975, dos meses antes de la muerte de Franco. Se trata de Victoria Sánchez Bravo, hermana de José Luis Sánchez Bravo, y Flor Baena, hermana de José Humberto Baena.
La última orden de ejecución
Tras aquella orden de ejecución, cinco personas fueron fusiladas y tres indultadas. Esas tres a las que les conmutaron la pena también estarán en el Salón García para contar su experiencia. Son Vladimir Fernández Tovar, Pablo Mayoral y Manuel Blanco Chivite. Moderará la conferencia Jorge Parada, gobernador civil en Pontevedra durante la época de Felipe González y actual miembro del comité de ética del PSdeG.
Margarita Teijeiro señaló que se trata de “unas jornadas históricas en Vilagarcía” y animó a los vecinos a participar.
La programación comenzará el día 8 con la proyección del documental “Septiembre del 75”, elaborado sobre la figura de José Baena. Será a las 20.30 horas en el Salón García.
"Luisiño", el más joven de los fusilados en Rubiáns
Javier Frieiro, uno de los miembros de menor edad de la Iniciativa Cidadá pola Memoria Histórica, realizó una reseña biográfica sobre Luis Fernández Génova, el más joven de los asesinados en el cementerio de Vilagarcía, con solo 18 años. Según su relato, Luis era hijo de un matrimonio de Santiago. Su madre sufría malos tratos por parte de su marido, por lo que decidió emprender una nueva vida y se marchó con su hijo a Madrid, donde tenía un familiar. Pero las cosas no salieron como esperaban y regresaron a Galicia, concretamente a Vilagarcía. Era la época de la República y “Luisiño se empapa del ambiente obrero y reivindicación de cambio, frecuentando los centros de socialización de la época”, cuenta Frieiro.
A él y a todas las demás personas que fueron fusiladas por el Régimen se les rendirá homenaje el próximo 10 de julio con la instalación de una placa. Un 10 de julio de 1942 moría la madre de Luis a los 43 años, una mujer que enfermó tras la muerte de su hijo.
