El eclipse solar parcial de ayer no generó en Arousa la expectación de otras ocasiones, tal vez por coincidir en plena jornada laboral y porque en los colegios están inmersos en la recta final del curso, lo que dificulta organizar con los niños actividades complementarias a las lectivas. Pese a todo, hubo quien se animó a observar el fenómeno astronómico (en el recuadro inferior), como el personal de un taller mecánico de Ribadumia, que aprovechó unas gafas de soldador para poder presenciar el espectáculo natural.