Unos 200 vecinos de Vilaxoán se concentraron en la tarde de ayer en la plaza de Galicia de Vilagarcía en protesta por la constante retirada de servicios que están sufriendo. A la inactividad en el centro médico, los vecinos temen una huida de la oficina de Correos, lo que obligaría a todos ellos a desplazarse a Vilagarcía para realizar cualquier tipo de trámite. Entienden que el Concello no está presionando lo suficiente para defender los intereses de los vecinos y temen que pueda ser el principio del fin para toda esta zona por la ausencia de servicios que consideran esenciales. Durante la concentración se aludió a varios problemas que existen en Vilaxoán que llevan años sin solucionarse pese a los sucesivos gobiernos que han pasado por Ravella, sintiéndose los vecinos totalmente olvidados.
Durante la concentración hubo protestas contra Sanidade y Correos, pero también contra el alcalde, Alberto Varela, al considerar que no se ha implicado lo suficiente en evitar que se pierdan estos servicios. Mientras, el regidor se reunía el pasado viernes con responsables de Correos, que le aseguraron que la firma pública no tiene la intención de moverse de Vilaxoán.
De hecho, apuntaron que las políticas que está siguiendo el organismo estatal son las de potenciar los servicios en las zonas rurales y donde existe dispersión poblacional, todo lo contrario a lo que supone el cierre de oficinas como la de Vilaxoán.
Piden la reapertura del centro médico y que no se cierre la oficina de Correos
El encuentro responde al compromiso de Varela con los representantes de la asociación de vecinos y del Clube de Remo Vilaxoán, que le trasladaron su preocupación ante el temor del inminente cierre de la oficina postal de la localidad. Ante los insistentes temores, el alcalde optó por contactar directamente con los responsables del servicio para conocer cuales eran sus planes de futuro. En eses planes destacaron la fuerte apuesta por ampliar y mejorar las prestaciones en el rural y en zonas con población dispersa. De hecho, Correos está desarrollando un plan piloto en la provincia de Lugo para suplir, a través de Correos, la situación que se está dando con el desmantelamiento de las sucursales bancarias en localidades muy pequeñas. Se está probando una especie de giro postal a domicilio para aportar liquidez en efectivo a los vecinos que, simplemente, lo activan a través de un aviso telefónico.
