Tras la dura cuarta ola vivida en O Grove, cuando la localidad alcanzó su registro récord en cuanto a contagios por coronavirus y se convirtió en el municipio gallego con mayores restricciones, los sacrificios hicieron que el pueblo pudiera recuperarse hasta situarse a las puertas de ser, nuevamente, “municipio libre de COVID”.
Pero no fue así, ya que solo pudo bajar hasta un caso activo. Lo que sucede es que el domingo se le sumó otro, y ayer, uno más.
¿Qué quiere decir esto? Pues de momento no pueden extraerse conclusiones, sobre todo porque se trata de subidas mínimas. Pero no cabe duda de que si la tendencia se mantiene, quizás demuestre el inicio de un peligroso repunte que nadie desea y que, además de causar estragos sanitarios, podría ser la puntilla económica para la localidad.
El alcalde, preocupado
Eso es lo que teme el alcalde, José Cacabelos, quien hace un llamamiento a la prudencia y advierte: “No nos podemos volver a permitir restricciones porque necesitamos normalidad y recuperar el turismo, la economía y la sociedad”.
Preocupado por lo que pueda suceder, y consciente de que las consecuencias serían terribles en caso de nueva ola de contagios en pleno verano –o a las puertas del mismo–, el regidor se pronuncia con contundencia.
“No nos podemos volver a permitir restricciones porque necesitamos normalidad y recuperar el turismo, la economía y la sociedad”
Lo hace para solicitar “precaución máxima, ya que todos tenemos experiencia ya y sabemos lo peligroso que puede ser un rebrote de los contagios”.
Hay mucho en juego
Lo que quiere es que sus vecinos sean conscientes de todo lo que está en juego, de ahí que los llame a “respetar escrupulosamente absolutamente todas las medidas de prevención, garantizando siempre el uso de mascarilla, manteniendo la distancia de seguridad y evitando las reuniones con no convivientes, sobre todo en espacios cerrados”.
Cacabelos también demanda de los mecos y de cuantos visitan el pueblo, “que todo aquel que presente algún síntoma, por mínimo que le parezca, lo comunique inmediatamente”.
E incluso les recomienda iniciar “una cuarentena voluntaria con la que evitar complicaciones y detener cualquier posibilidad de contagio”.
Abundando en ello, insiste en que “hay muchos positivos que no son detectados y acaban contagiando a quienes los rodean, lo cual provoca repuntes que nadie desea”.
El alcalde meco termina diciendo que “no hay que bajar nunca la guardia y debemos seguir pensando que el COVID sigue ahí, por lo que debemos protegernos y ser solidarios con los demás actuando con precaución y responsabilidad”.
