El paseo a Vilaxoán se convertirá en una realidad en algo más de un mes. Así lo anunció el alcalde Alberto Varela en una visita a la zona en la que comprobó el buen ritmo y el avance de unas obras que ya encaran su recta final.
El primer edil de Vilagarcía subrayó la importancia que tiene esta actuación en la mejora de la calidad de vida de los vecinos, así como la ventana que se abre al mar en una zona en la que la convivencia entre el tráfico rodado y peatonal no era la idónea.
Esta es una zona muy frecuentada para pasear, correr o andar en bicicleta y ahora se van a salvar todas las incomodidades que había en la convivencia con el tráfico vial
“Esta es una zona muy frecuentada para pasear, correr o andar en bicicleta y ahora se van a salvar todas las incomodidades que había en la convivencia con el tráfico vial. Se trata de corregir por un lado cualquier tipo de vertidos y el dejar de darle las espaldas al mar. Es una zona maravillosa en la que podremos disfrutar del esparcimiento y la tranquilidad”, apuntó Alberto Varela Paz.
Cabe destacar que el proyecto ha ido sufriendo variaciones sobre su plano inicial. Sin ir mas lejos el retranqueo del muro de la depuradora ha supuesto un aumento en el coste previsto hasta situarse en los 831.000 definitivos. Una partida que según el alcalde, “ha sido posible gracias a la consecución de Fondos Europeos y también al superávit municipal debido a la buena situación económica del Concello”.
El retranqueo del muro de la depuradora ha supuesto un aumento en el coste previsto hasta situarse en los 831.000 definitivos
Alexandre Mouriño, director de la obra, quiso subrayar que “va a pasar de ser una zona de paso a una zona estacional. Se van a instalar 22 bancos de tres metros, algunos incluso para poder tumbarse cerca del mar.
La zona tiene un potencial muy grande y ha habido una buena visión política para recuperarla porque es sensiblemente favorable para la convivencia y no solo para el tránsito
Añadió al respecto que “la zona tiene un potencial muy grande y ha habido una buena visión política para recuperarla porque es sensiblemente favorable para la convivencia y no solo para el tránsito. Es algo que hemos notado durante el trabajo con la masiva visita de personas, sobre todo los fines de semana, y que todavía podrán disfrutar más del lugar una vez se terminen los trabajos. Va a ser un éxito que caerá por su propio peso”.
Según la nueva normativa de la Dirección General de Tráfico y al ocupar una misma plataforma zona verde, carril de tráfico, aceras y carril bici, la máxima velocidad en el paseo se limitará a 20 kilómetros por hora. Además, se plantarán un total de 44 olivos en los poco más de 300 metros de largo, árbol elegido para su perfecta convivencia con el medio marino que le rodea en el lugar.
