La Fundación Amigos de Galicia realizó en 2020, el año de la pandemia, un total de 21.586 atenciones a personas en riesgo de exclusión social, de las cuales un tercio (concretamente un 35,89%) fueron dirigidas a niños. Las peticiones de ayudas para la cobertura de necesidades básicas (alimentación, higiene, limpieza, ropa y calzado) se dispararon entre principios y final de año de un 42% (del total de solicitudes recibidas) a un 71%. “Esto se debe, en gran medida, a la posición de precariedad de muchas familias que vieron alterada su situación socio-familiar al perder su trabajo o encontrarse en un Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) cuya temporalidad no está definida”, explican desde la entidad con local en Vilagarcía (en la avenida de Matosinhos).

La Fundación indica en su memoria de actividades de 2020 que “la pandemia mundial de COVID-19 no hizo más que agravar la situación de muchas familias gallegas que vieron como su coyuntura económica empeoraba. En este 2020 tuvimos que reinventarnos y reforzar nuestra actuación, cambiando la operativa de trabajo para continuar con nuestra labor de atención a las personas más vulnerables en riesgo de exclusión social, especialmente de aquellas que cuentan con menores a cargo”.

En este sentido, cabe recordar que detrás de esta decisión está la prohibición por parte de la Consellería de Sanidade de que Amigos de Galicia continuase manipulando alimentos en la nave situada junto a la estación de tren de Vilagarcía, donde se guardaban los productos y desde donde se distribuían. La entidad fue objeto de investigación por parte de la Fiscalía sobre el presunto almacenaje de alimentos caducados.

Esto ocurrió a principios de 2020, justo antes de que estallase la pandemia de coronavirus. Entonces la Fundación cambió de sistema para hacer llegar los alimentos a los domicilios sin recursos. Así, ahora entrega tanto alimentos perecederos y congelados como no perecederos a través de cadenas de alimentación gallegas. “Con esta operativa podemos llegar a todos los puntos de Galicia dada la red de supermercados con la que cuentan las cadenas alimenticias”, defiende la ONG.

Con respecto a los principales colectivos atendidos predominan, por este orden, las mujeres víctimas de violencia de género o en situación de vulnerabilidad (94,7%), las familias beneficiarias de la Risga (70,6%), monoparentales (66%), inmigrantes (25,6) y minorías étnicas (12,8%).

Protección de la infancia

Para Amigos de Galicia los niños constituyen uno de los colectivos prioritarios. “Tenemos como misión principal trabajar para que todos los menores tengan garantizados sus derechos. Muchas veces son las personas más vulnerables y las más silenciadas en situaciones de exclusión social, por eso la Fundación Amigos de Galicia pone a disposición de la infancia toda la ayuda que sea necesaria”, recalcan.

¿Cómo? A través de distintas acciones, como por ejemplo personándose como acusación popular en los procedimientos judiciales “en los que se vulneran los derechos de los menores” (actualmente en ocho casos, como el del triple crimen de Valga) o a través del programa que repartió libros y material escolar entre 1.031 menores en 2020.

La campaña de juguetes distribuyó 2.589 regalos entre los menores gallegos y Amigos de Galicia pagó tratamientos médicos como gafas, audífonos (con un coste medio de 3.952 euros según los datos aportados por la Fundación) y sistemas de monitorización de glucosa (4.146 euros de gasto medio).

209 víctimas de violencia

En cuanto a las mujeres víctimas de violencia de género o en situación de vulnerabilidad, Amigos de Galicia ayudó a 209 a lo largo del año. Los servicios prestados abarcan desde el asesoramiento psicológico, jurídico, laboral y apoyo social.

Mayores

En lo que respecta a las personas mayores, la ONG hace hincapié en las que viven solas. Recuerda en la memoria que el año pasado fueron encontrados muertos en sus casas “al menos” 35 ancianos. Para participar en el programa “Mellor acompañado” es necesario llamar al teléfono 678.999.922.

Empleo: 991 inserciones

Por último, otro de los ámbitos en los que incide la actividad de Amigos de Galicia es el empleo. En 2020 se contabilizaron 7.137 atenciones, a través de las cuales se logró la inserción laboral de 991 personas: 312 de la provincia de Pontevedra, 256 de la de A Coruña, y 423 de la de Ourense. Está previsto que en 2021 la entidad abra en Lugo una oficina para ofrecer este servicio laboral. Vilagarcía cuenta con una en la avenida de Matosinhos.

La Fundación Amigos de Galicia cuenta con 1.051 patronos, 395 voluntarios y 325 empresas colaboradoras que resultan claves para poder prestar ayuda social a las personas que se encuentran en riesgo o situación de exclusión social.