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El sector inmobiliario de Vilagarcía capea la crisis sanitaria con más ventas que en 2018

Valiñas está construyendo en Rodrigo de Mendoza el primer bloque de pisos nuevos de la última década en Vilagarcía. Iñaki Abella

La pandemia de COVID ha afectado a la práctica totalidad de sectores económicos. Y el inmobiliario no es ajeno a la crisis sanitaria, si bien en algunos municipios está capeando el temporal con resultados más fructíferos que en otros. Es el caso de Vilagarcía, donde los precios de la vivienda siguen al alza (de 983 a 988 euros el metro cuadrado del cuarto trimestre de 2019 al mismo de 2020) y el año de la pandemia se cerró con más ventas que en 2018.

Según el Ministerio de Fomento, los precios de la vivienda en Vilagarcía aumentaron de 983 a 988 euros el metro cuadrado del último trimestre de 2019 al mismo de 2020, en plena pandemia

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Con respecto a 2019 (un año muy bueno para las agencias tras sucesivas caídas), la capital arousana registró una disminución de las transacciones inmobiliarias más tímida (11%) que el conjunto de la comarca (un 17,6%, de 983 a 810).

En cifras absolutas, según los datos que acaba de publicar el Instituto Galego de Estadística (IGE), en Vilagarcía se vendieron en 2020 un total de 303 viviendas, de las cuales solo doce están consideradas como nuevas. Las 291 restantes eran de segunda mano.

Estos 303 pisos y casas suponen 39 menos que en 2019, cuando cambiaron de propietario 342 inmuebles.

Repunte en 2019 tras una década de "vacas flacas"

Con todo, el volumen de viviendas colocadas en el mercado el año pasado fue superior al de ejercicios como el de 2018 (278 inmuebles vendidos), 2016 (221), 2015 (152), 2014 (191), 2013 (182), 2012 (296) o 2011 (245), los ejercicios posteriores a la galopante crisis que estalló en 2008.

Tras esa época de vacas flacas para el sector del ladrillo, la compraventa de pisos y casas repuntó en el municipio vilagarciano en 2017 a 335 operaciones, volvió a bajar en 2018 y subió en 2019, convirtiéndose este en el año de más ventas de la última década.

La excepción de Meaño

Con respecto a los demás concellos de O Salnés, todos experimentaron en 2020 un descenso de actividad en el sector inmobiliario a excepción de Meaño, localidad en la que se vendieron más viviendas que en 2019: 15 frente a 11.

Por su parte, Sanxenxo, el municipio turístico por excelencia de Galicia, pasó en el año de la pandemia de 314 transacciones a 259.

En O Grove el descenso de compraventa de viviendas fue acusado. Iñaki Abeñña

También O Grove sufrió las consecuencias de la crisis sanitaria, con solo 69 viviendas vendidas, casi la mitad de las 110 de 2019.

Cambados y Vilanova sufrieron una situación parecida, pues la villa albariñense pasó de 56 a 48 operaciones y la valleinclaniana de 51 a 45. Al igual que Vilagarcía, en estos concellos la caída fue mucho más ligera que en otros ayuntamientos vecinos.

En A Illa la venta de inmuebles bajó en un año de 52 a 37, en Ribadumia de 31 a 24 y en Meis de 16 a 10.

Meis se pone de moda para mudarse a vivir

Además de las ventas, otro factor indicativo de la salud del mercado inmobiliario son las licencias de obra. Todavía no han sido publicados los datos relativos a 2020, pero los de 2019 evidenciaron un incremento en O Salnés, pasando de 88 (en 2018) a 94 (en 2019) en permisos de rehabilitación, y de 92 a 114 en los de obra nueva. Por tanto fueron más numerosos los permisos para construir nuevos inmuebles que los destinados a remodelaciones o restauraciones.

El incremento de licencias se produjo en casi todos los concellos de la comarca salvo en Meaño (de 10 a 5), Ribadumia (11 a 3), Vilagarcía (de 48 a 37) y Meis (de 22 a 20). No obstante el ayuntamiento meisino, pese a haber concedido dos permisos menos que el año anterior (concretamente de rehabilitación), se sitúa a la cabeza en obra nueva, con 16 licencias, solo por detrás de Sanxenxo (33) y Vilanova (19). De hecho el pequeño municipio situado en el corazón de O Salnés aprobó más permisos que Vilagarcía, la localidad más poblada con diferencia sobre las demás y capital de la comarca.

Cuando el IGE publicó estos datos (que únicamente engloban las actuaciones de envergadura, como levantar un edificio, una casa, una nave industrial o bien grandes reformas), la alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, apuntaba que en 2019, “y en 2020 si cabe más todavía, la gente apuesta por una vida cómoda en el rural. Además el concello de Meis está muy bien comunicado, con la autopista, la autovía y la carretera de Vilagarcía a Pontevedra. Somos un concello con mucho encanto, en el que se puede vivir la naturaleza”, destacaba la regidora socialista.

Giráldez confirmaba a finales de 2020 que “estamos detectando que hay mucha gente joven interesada en construir en nuestro concello”. “El resumen que hacen mis compañeros de gobierno es que Meis se está poniendo de moda y creo que es la verdad”, concluía la primera edil.

La pandemia cambia las preferencias de los compradores: áticos con terraza y casas unifamiliares con jardín


Entre lo más buscado por los clientes están las casas unifamiliares con terreno o bien parcelas en las que construir la vivienda, así como áticos con terraza en las zonas más urbanas de la ciudad, según confirman fuentes del sector inmobiliario de Vilagarcía, que han observado que el confinamiento de hace un año ha hecho que muchas familias se hayan replanteado su modo de vida.

Y también ha afectado a las propias inmobiliarias sobre el tipo de producto a ofrecer. Algunas empresas han reorientado sus próximas promociones hacia inmuebles residenciales con más espacios abiertos, en lugar de bloques de pisos. Es el caso de Avelino Barreiro, que proyecta poner a la venta quince parcelas en la zona de O Piñeiriño y Fontecarmoa en la que los compradores podrán construir sus propias casas o bien utilizar el diseño realizado por el arquitecto que contrata la inmobiliaria. Las fincas ya contaban con varias reservas antes de entrar en fase de comercialización.

Otra promotora de Vilagarcía, Valiñas, está construyendo unos edificios en la avenida de Rodrigo de Mendoza (en el tramo más próximo a San Roque) y ha vendido un buen número de pisos, lo que evidencia tanto la existencia de demanda en la ciudad como la escasez de obra nueva en marcha. De hecho Valiñas recibió la primera licencia de obra municipal para construir edificios en más de una década de parón de obra nueva colectiva en la capital arousana.

Hay más empresas con proyectos inmobiliarios para la ciudad, como es el caso de Promociones Barreiro Pérez, que prevé construir 27 pisos en la zona de Bosque de Desamparados.

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