El alcalde de O Grove, José Cacabelos; la edil de Obras, Ángeles Domínguez; el responsable de Rural, Juan Otero, y el de Política Social, Kito Parada, visitaron ayer la vieja escuela infantil de Monte da Vila, que se acondiciona desde hace meses para ser convertida en un local social en el que desplegar actividades como las del programa de conciliación familiar “Vellos Tempos”, dirigido a personas mayores.

Siendo consciente del retraso acumulado, cuyas razones también quiso explicar, el regidor sugirió que la obra puede estar terminada “en un mes y medio”.

Los aseos han sido adaptados.

Los aseos han sido adaptados. FdV

De este modo, sale al paso de las críticas recibidas en los últimos días a instancias de la asociación de mujeres rurales A Lagoa, de San Vicente; entidad que censura tanto el retraso en la apertura de Monte da Vila como que los locales donde ya funcionaba “Vellos Tempos” sigan inoperativos, un año después de que se declarara el estado de alarma.

Ahora se afronta la conexión al saneamiento. | // FDV

Dos fases

El alcalde dejó constancia, como ya había explicado hace días en FARO, de que la mejora del centro se dividió en dos fases. La primera, ya finalizada, se centraba en el acondicionamiento interior “para su uso como local social en el que desplegar el Vellos Tempos, que cada vez tiene más usuarios”.

En esa primera fase “hemos tenido que reformar el suelo, dotar el inmueble de climatización y sustituir y adaptar los aseos, ya que estaban pensados para su uso por parte de niños”, aclaró.

“Hemos tenido que reformar el suelo, dotar el inmueble de climatización y sustituir y adaptar los aseos, ya que estaban pensados para su uso por parte de niños”

José Cacabelos - Alcalde de O Grove

Pero las obras no quedaron solo en eso, ya que “durante su ejecución descubrimos un problema con el que no contábamos y del que nadie había informado nunca, como es que no existía conexión al saneamiento, sino que las aguas fecales iban a una fosa séptica”.

Es por eso que en la segunda fase se procede a la conexión al alcantarillado y la mejora integral del exterior, “ampliando hasta llegar a dos metros y medio la acera de todo el perímetro de este centro, haciéndola totalmente accesible y eliminando barreras arquitectónicas”.

"Descubrimos un problema con el que no contábamos y del que nadie había informado nunca, como es que no existía conexión al saneamiento"

Al mismo tiempo, Cacabelos y su gobierno indican que va a retranquearse la valla de la fachada principal para dar mayor amplitud a la calle, teniendo en cuenta que en ese lugar se asienta el instituto y que, por ende, transitan numerosos jóvenes cada mañana.

Los representantes municipales, en el exterior de la escuela reformada, ayer. FdV

Acera hasta el IES Monte da Vila

Se trata, en definitiva, de “mejorar la seguridad vial en Monte da Vila”, en palabras del máximo mandatario.

De ahí que el ejecutivo meco también esté valorando instalar una acera que conecte la que llega hasta el centro de salud con la entrada al centro educativo.

Creación de huertos y compostaje

Abundando en todo esto, el alcalde sugería ayer que “la reforma total de la escuela de Monte da Vila y su entorno nos permitirá disponer muy pronto de un espacio amplio y cómodo en el que también desplegar cursos y otras actividades” relacionados con las concejalías de Servicios Sociales y Juventud.

Los protocolos COVID afectan al programa

Además de referirse a las obras acometidas en Monte da Vila, José Cacabelos aludió ayer a la polémica vivida en los últimos días sobre el parón en el programa “Vellos Tempos”.

El regidor quiso dejar claro que actualmente “está parado por las exigencias derivadas de los protocolos COVID y las restricciones de la Xunta, pero en cuanto podamos se retomará.

Esas medidas preventivas “no nos permiten atender a los usuarios en los locales de Balea y Virxe das Mareas, pero a pesar de todas las dificultades, y aunque con menos horas de las que nos gustaría, debo decir que, sin coste alguno para ellos, los beneficiarios del Vellos Tempos reciben la visita puntual de los monitores en sus domicilios”.

De lo que se trata ahora, concluye José Cacabelos, es de “recuperar pronto la normalidad, ya que el Vellos Tempos es un programa cada vez más demandado y de indudables beneficios sociales, de ahí que estemos haciendo este esfuerzo para acondicionar el interior y el exterior de la vieja unitaria de Monte da Vila”.

Unos usuarios y otros podrán disponer de un rehabilitado jardín en el que desplegar propuestas como la creación de huertos o la implantación del compostaje.

Será, en consecuencia, “un espacio multiusos enfocado hacia políticas sociales”, con prioridad para los usuarios de “Vellos Tempos” en horario vespertino, de lunes a viernes, con cursos formativos en la sesión matinal y propuestas para los jóvenes durante el finde.

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