La presidenta de la Mancomunidade de O Salnés, Marta Giráldez, ha solicitado a Augas de Galicia una reunión urgente para abordar una solución ágil al problema que está generando el vertido de Cabanelas. Esta mancha que se detectó la semana pasada y que ya ha sido denunciada por la Policía Local de Cambados, por el Seprona y por agentes medioambientales, proviene del alcantarillado de la red mancomunada, convirtiéndose en la principal deficiencia de la misma. De hecho, hace más de una década que se viene denunciando por parte de la Mancomunidade, ente que alertaba de la necesidad de que se mejorase.
De hecho, Augas de Galicia llegó a redactar un proyecto para solucionar el vertido, un documento que “nos confirmaron el pasado mes de octubre, durante una reunión, que ya estaba listo y que nos lo enviarían en breve, pero nunca hemos vuelto a saber del mismo”, explica Giráldez. La presidenta de la Mancomunidade reconoce que “este problema se debe a un exceso de caudal, que es lo que provoca el vertido, pero es una situación que debemos corregir lo antes posible, porque no podemos ser las administraciones las que contaminemos y después exijamos a los demás que cumplan las normas, por eso se debe actuar cuanto antes”.
Entrevista urgente
Lo que tiene claro Giráldez es que la solución está en las manos de la Xunta y es competencia de esta administración, por eso “hemos solicitado una entrevista urgente, para tratar de encontrar una respuesta, que es la que están pidiendo todos los sectores que tienen algún tipo de relación con el río Umia”.
La presidenta de la entidad también reconoce que “este vertido no es algo nuevo, sino que Augas de Galicia es conocedora de lo que ocurre, por lo tanto hay que buscar una solución antes de que pueda provocar todavía más daños en el ecosistema del río Umia”. En teoría, el proyecto diseñado por Augas de Galicia para acabar con el vertido de Cabanelas pasa por la instalación de un tanque de tormentas, que permitiría incrementar la capacidad del pozo de bombeo, y por instalar una tubería que comunique este punto con la estación depuradora de Cabanelas, situada a un kilómetro río abajo.
"Hay que buscar una solución antes de que pueda provocar todavía más daños en el ecosistema del río Umia"
Durante toda esta semana, el pozo ha evidenciado una de las carencias más importantes que tiene el alcantarillado, la no separación de aguas pluviales de las fecales. Mantenerlas unidas provoca un incremento del nivel en la red y esta acaba arrojando todo al río Umia para no colapsar. En este punto también se han detectado vertidos de aguas industriales sin depurar que se lanzaban a la red y acababan desbordando en Cabanelas.
Las quejas por el vertido han llegado desde múltiples sectores. Los primeros en quejarse han sido los responsables del Náutico O Muiño de Ribadumia, club de piragüismo que se encuentra a unos 300 metros del punto de vertido y que llevan años reclamando una solución. En los últimos días han lanzado una campaña en Change.org pidiendo que se solucione lo antes posible un a situación que llevan años soportando.
Marisqueo
El marisqueo es otro de los sectores que se ve más afectado por la proliferación de vertidos en el Umia. El cauce fluvial desemboca en la zona de O Sarrido, uno de los bancos marisqueros más productivos de la Cofradía de Cambados y los constantes vertidos al río suponen una seria amenaza para toda su producción, algo que no están dispuestos a consentir. También a escasos metros de donde alivia el pozo de bombeo se encuentra la captación de agua para la isla de A Toxa.
