O Salnés ya se aproxima al medio millar de casos activos de coronavirus. El Sergas notificó ayer a los nueve ayuntamientos de la comarca arousana la existencia de 457 vecinos con COVID-19, lo que supone 31 más que en la víspera. El avance de la pandemia es imparable en O Salnés desde las fiestas de Navidad, pero en los últimos días parece haber acelerado todavía más. El domingo 17 a media tarde, había en Arousa 344 pacientes de COVID; seis días después, el sábado a media tarde ya eran 457. Esto significa que en solo una semana los casos activos aumentaron en 113, un 33 por ciento más.
El Sergas proporciona a los municipios diariamente el número de casos activos vigente a media tarde del día anterior, de modo que no será hasta el lunes cuando los alcaldes tengan en su poder el dato de infecciones de ayer domingo. Pero, en todo caso, el informe de ayer del Sergas desvela que O Salnés llega en una situación muy comprometida a la reunión del comité clínico que asesora a la Xunta en la pandemia, y en la que con toda probabilidad se acordarán restricciones más duras.
Sanxenxo y Meis
De todos modos, la situación epidemiológica no es homogénea en los nueve municipios, y aunque el número de positivos aumenta en la mayoría de las localidades, el ritmo de crecimiento es distinto.
Así, en Sanxenxo se ha producido una auténtica explosión de nuevos casos. Hace seis días, había 46 vecinos con COVID en este ayuntamiento; el viernes ya eran 72, y el Sergas notificó ayer la friolera de 102. Sanxenxo figura actualmente entre los concellos con restricciones medio-altas, pero este empeoramiento de la situación sanitaria podría ser la antesala del paso a una fase de limitaciones mayores.
La situación es igualmente delicada en Meis, a tenor de los datos oficiales de la Xunta. Hace menos de una semana había 26 contagiados, pero ahora ya son 46. Se trata de una cifra muy elevada para un concello de 5.000 habitantes, pero además el ritmo de infecciones está desbocado desde Reyes.
En Vilagarcía, el incremento de las infecciones parece haberse frenado ligeramente, pero tampoco llega el ansiado descenso de la curva que empezaba a adivinarse a finales de diciembre, pero que se vio rápidamente truncado por los contagios de Navidad. La capital arousana ya ronda los 150 infectados.
La evolución de Cambados también preocupa, porque desde que se aliviaron las restricciones los casos activos no paran de crecer. De todos modos, no lo hacen a un ritmo vertiginoso, de ahí que la incidencia acumulada en la villa del albariño a 14 días todavía sea moderadamente buena.
Finalmente, Vilanova es otro municipio muy afectado ahora mismo por el COVID. A principios de año, llegaban los dedos de una mano para contar los positivos entre sus vecinos, pero ahora ya se acercan al medio centenar.
Si se toma como referencia la incidencia acumulada en los últimos 14 días, Meis es el municipio que está peor, con unos 955 casos por cada 100.000 habitantes. Pero también ha empeorado sobre manera la pandemia en Sanxenxo, con una incidencia acumulada de 550 casos por cada 100.000 habitantes. El Gobierno considera que cualquier incidencia que supere los 250 casos por 100.000 es un síntoma de riesgo elevadísimo de contagio.
Mientras, en O Grove, Meaño, Ribadumia y A Illa están mejor. En los últimos días les han notificado pocos casos activos nuevos, hasta el extremo de que Ribadumia y A Illa incluso tenían el sábado menos enfermos que hace una semana.
Más presión hospitalaria
El incremento de contagios en O Salnés está en la tónica de lo que sucede en la práctica totalidad de áreas sanitarias gallegas, donde en los últimos días se está produciendo un alarmante incremento de la presión hospitalaria.
En el área sanitaria de Pontevedra-O Salnés hay en estos momentos 1.650 casos activos. Son 71 más que en la víspera, después de que se diagnosticasen 133 infecciones más, dato al que hay que restar el de curados en las últimas 24 horas. Pero, por encima de estas cifras, lo que más preocupa a las autoridades es que cada vez hay más pacientes que terminan ingresados.
El viernes había 84 hospitalizados en el área Pontevedra-O Salnés, pero anteayer sábado ya eran 102. Seis de ellos están en el Hospital do Salnés, y hay 15 personas en la UCI de Montecelo, dos más que en la víspera. Asimismo, se ha registrado un nuevo fallecimiento en el área. El Sergas comunicó ayer la muerte de una mujer de 70 años, con patologías previas, que estaba ingresada en Montecelo. Es la víctima número 98 del área sanitaria desde el inicio de la pandemia.
Confinan tres aulas del colegio de Vilaxoán tras el positivo de una maestra
La asociación de padres de alumnos del colegio de Vilaxoán y la asociación de vecinos de Faxilde hicieron público ayer a través de sus redes sociales que la Xunta de Galicia ha ordenado el cierre de tres aulas de Educación Infantil del colegio de Vilaxoán. La medida se ha adoptado después de que diese positivo una maestra de estimulación del lenguaje que trabaja en Vilaxoán a tiempo parcial, pues la Xunta la tiene destinada en más centros. Así las cosas, se ha confinado a los alumnos de tres aulas de Infantil (los niños tienen entre tres y cinco años), y en las próximas horas irán siendo convocados para la realización de las PCR, aunque lo que no ha trascendido es si se le harán a todos los alumnos o solo a una parte de los mismos. Esta incertidumbre está generando malestar entre las familias de los pequeños. En O Salnés y Ullán hay entre 120 y 130 casos de estudiantes o trabajadores de centros educativos con coronavirus. Hay aulas cerradas en Valga, Cambados, Vilagarcía y Sanxenxo.
Cacabelos critica las ayudas a los hosteleros: 1.400 euros en seis meses
El Concello de O Grove celebra hoy un pleno, y el grupo de gobierno, del PSOE, presenta una moción en la que insta a la Xunta de Galicia a que cree un fondo de 250 millones de euros para ayudas a la hostelería y otros sectores castigados por la pandemia. El alcalde, José Cacabelos, plantea que la Xunta ha recibido fondos extraordinarios del Estado para paliar la crisis, pero que ha repartido una cantidad mínima de los mismos entre los afectados directamente. En este sentido, critica la cuantía recibida por los hosteleros de O Grove, ya que según él, las ayudas medias fueron de 1.400 euros para un periodo de medio año, lo que equivaldría a unos 230 euros al mes. Sin salir de O Grove, el BNG presenta una moción en la que propone instar a la Xunta a que vacune ya a las trabajadoras del servicio de Ayuda en el Hogar, y no a partir de marzo, como está previsto. Y en Valga, el PSOE reclama un cribado masivo en el Concello, que el cierre sea conjunto con Pontecesures, y un plan de ayudas a las empresas.
