José Cacabelos, que hace días anunciaba en FARO DE VIGO su comienzo inminente, confirmaba ayer que será el lunes cuando arranquen los trabajos de reforma del barrio de O Sineiro, con los que se pretende reducir el riesgo de inundaciones en la localidad meca.
Como estaba previsto, lo harán en la calle Cantabria, donde, según el propio alcalde de O Grove, va a realizarse la sustitución de las canalizaciones subterráneas, procediendo así a la mejora y separación de las tuberías de fecales y pluviales. Es, en concreto, una actuación que puede evitar que se produzcan problemas como los vividos en la tarde noche del jueves en la villa, donde se registraron importantes desbordamientos que afectaron a bajos comerciales, garajes y calles.
Esta actuación en un tramo de la Rúa Cantabria forma parte, insiste, del “plan estratégico” diseñado para todo el barrio de O Sineiro, siendo preciso empezar por el tramo aludido “porque así nos lo aconsejan los técnicos municipales, que llevan tiempo advirtiendo de que la situación de determinadas tuberías del saneamiento y la recogida de pluviales es preocupante en este punto y que, por lo tanto, es obligado empezar a repararlas”, declara Cacabelos.
100.000 euros de la Diputación
Abundando en esta obra, que llega cuando se encuentra en su recta final la transformación de Beiramar, cuyo coste asciende a unos 100.000 euros y que está financiada por la Diputación de Pontevedra, el máximo mandatario meco declara que “va a consistir en separar las pluviales de las fecales cambiando toda la tubería, pero aprovecharemos, también, para mejorar todo el firme en la plataforma de rodadura”.
Asimismo, “vamos a ampliar las aceras a dos metros de ancho, situándolas a nivel, y haremos que la calle tenga un solo sentido de circulación, que es una medida que se aplicará en otros viales del barrio de O Sineiro para evitar las dificultades de tránsito actuales y dar mayores comodidades y seguridad a los peatones”.
La importancia de una correcta separación
A raíz del último temporal vivido en O Grove volvió a quedar patente la importancia de separar fecales de pluviales. Las inundaciones en la calle Pablo Iglesias y su entorno son un claro ejemplo de ello.
“De ahí la importancia de que acometamos obras de separación allí donde actualmente comparten la misma red de saneamiento, lo cual puede derivar en inundaciones cuando llueve intensamente”, declara el alcalde de O Grove.
“Como sucedió el jueves, cuando cayó una gran cantidad de lluvia en muy corto espacio de tiempo; y además la tromba de agua coincidió con la pleamar”, reflexiona.
El regidor pide paciencia y comprensión
En previsión de lo que puede suceder, dadas las incomodidades que siempre acarrean este tipo de proyectos, el alcalde de O Grove ya advierte de ello a los vecinos y les pide prudencia y paciencia ante las obras que van a tener que soportar.
Lo que hace es dirigirse a los residentes en la Rúa Cantabria y su entorno para decirles que estas obras van a extenderse durante las próximas semanas y van a originar cambios y restricciones viarias.
"La mejora de la calle Cantabria se afronta con el objetivo claro de mejorar la situación del saneamiento y la recogida de pluviales, para acabar con los problemas que se están registrando en esa zona”
Señala como ejemplo que “en el tramo que se levante en esta primera fase no se va a poder aparcar durante la ejecución de los trabajos, y cuando ya estemos con las aceras y el asfaltado la calle se cerrará totalmente; unas molestias por las que pedimos disculpas”.
Esto lo lleva a defender de nuevo la necesidad e importancia de esta actuación, teniendo presente que "se afronta con el objetivo claro de mejorar la situación del saneamiento y la recogida de pluviales, para acabar con los problemas que se están registrando en esa zona”.
Si a esto se suma el hecho de que “la red de tuberías de O Grove es muy antigua, y que en muchísimas calles el saneamiento y las pluviales van en la misma canalización” –continúa el primer edil–, es fácil de explicar “que se produzcan inundaciones como las últimas -el jueves-, ya que al flujo habitual del saneamiento se suma de golpe toda el agua de lluvia”.
“Llevamos muchos años acometiendo este tipo de actuaciones
Más aún cuando, “como todos sabemos, nuestro pueblo tiene pronunciadas pendientes y zonas bajas como las de Confín, Terra de Porto y O Corgo, donde si coinciden fuertes lluvias y marea alta se produce un efecto tapón que impide evacuar el agua de lluvia, haciendo que retroceda y desborde por las alcantarillas”.
Así explica el alcalde las inundaciones registradas y la necesidad de seguir invirtiendo en separación de fecales y pluviales.
Lo hace al tiempo que reseña que en su gobierno “llevamos muchos años acometiendo este tipo de actuaciones para, precisamente, evitar estos problemas”.
