Sesé Otero, Jacobo Costas y su hijo Xaime son conocidos en O Grove por tratarse de la familia propietaria del barco de vapor “Hidria Segundo”, un barco de madera de treinta metros de eslora varado en el muelle de O Corgo desde 2016. Casi cinco años, una pandemia y una profunda rehabilitación después, el pailebote vuelve al agua para iniciar la que puede ser su última singladura, hacia el muelle de Vigo, donde le espera un amarre desde 2018.
El último barco clásico de vapor de España vuelve así a navegar y despeja una importante zona de la fachada marítima de O Grove, entre la estación de autobuses y el edificio de usos náuticos de Peralto.
En cierto modo vuelve a casa, el lugar en el que se había hundido en 1997 a causa de su abandono tras la extinción de la empresa a la que pertenecía entonces, Aljibes de Vigo.
