Fue localizada por primera vez en A Illa hace más de quince años y, en todo este tiempo, se ha ido apoderando de las piedras de O Bao desplazando a las especies autóctonas. La crepipatella dilatata se convertirá este año en un recurso más a explotar por parte de las mariscadoras de A Illa, al ser incluida por primera vez en el Plan Xeral de Explotación Marisquera. Conocida como “perla del océano”, esta especie tiene su origen en aguas de Sudamérica, preferentemente en el Pacífico, pero a principios de este siglo, comenzó a llegar a puntos como O Bao, donde se ha asentado con gran facilidad, desplazando a especies autóctonas como las lapas. Es un caracol de mar que todavía no ha conquistado las mesas españolas, pero que es muy apreciado en otros puntos de Europa, como el francés.

Esta especie no es la única invasora que ha despertado el interés comercial de la Cofradía de A Illa, que también ha puesto sus ojos en la donacilla, una especie similar a la coquina que, al igual que la crepipatella, podría convertirse en un complemento extractivo para las mariscadoras, al haberse detectado una presencia importante en tres zonas de trabajo, aunque esa posibilidad tendrá que aguardar todavía.