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Iñaki Abella/Diego Doval
Ver galería >En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
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En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
En torno a una veintena de hosteleros de Vilagarcía hicieron sentir su protesta en forma de cacerolada en la Plaza de Galicia. Las medidas restrictivas que afectan al sector continúan limitando lo que los profesionales del gremio reivindican como el derecho a trabajar. El sentido de culpabilidad que se les atribuye como vector de contagio, es otra de las cuestiones que irrita a los hosteleros. Por ello, han decidido hacer sentir sus útiles a modo de protesta para visibilizar y sonorizar una situación que consideran de auténtica injusticia debido a la "criminalización" a la que consideran que están siendo sometidos.
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