La construcción de la macroplanta de compostaje en el polígono de Baión ha superado el primer paso con la autorización para la compra de siete parcelas con una superficie de 20.000 metros cuadrados destinadas al plan de Sogama, ente que reserva otros 15 millones en 2021 para sus sofisticadas instalaciones de tratamiento de residuos. La decisión se adoptó en la reunión del consejo de administración de Suelo Empresarial del Atlántico (SEA) que se centró exclusivamente en la inversiones en las comarcas de las dos orillas de Arousa, al autorizar la compra de 317.000 metros cuadrados en el polígono de Rianxo para la firma “Conservas Cerqueira”, así como los espacios del polígono de Vilanova que acogen la planta de biorresíduos y la empresa “Vinova Group”.

SEA, que desde ayer preside Lucrecio Fernández, explica que se dio el visto bueno a la venta a Sogama de siete parcelas que suman una superficie de 19.586 metros cuadrados por un precio de 1.545.332 euros, por debajo de 80 euros el metro cuadrado.

En cuanto a la operación de “Vinova Group”, también se hace cargo de cinco parcelas en una superficie de 19.229 metros cuadrados. En este caso, explican, la empresa propietaria de “Congelados Cíes” ha optado por la oferta en derecho de superficie, impulsada por la actual gerencia de SEA para reactivar los polígonos en los que se detectaba menor actividad, lo que en esencia supone que la empresa “abonará cantidades muy reducidas, a modo de alquiler, que se descontarán parcialmente si opta al final por su compra”.

El organismo que gestiona este suelo industrial subraya su satisfacción por el hecho de que estas dos operaciones suscritas en el último consejo de administración “suponen un impulso fundamental para un polígono como el de Vilanova de Arousa que pese a estar en una ubicación estratégica y disponer de todos los servicios necesarios estaba prácticamente paralizado en los últimos años”.

Instalaciones de Sogama

Las instalaciones de Sogama en Baión es el proyecto de mayor repercusión y envergadura en la comarca de O Salnés por varias razones en especial las medioambientales aunque también por el hecho de que satisface en parte las expectativas de ocupación del polígono, sin olvidar la creación de puestos de trabajo que lleva asociada.

Los responsables de Sogama han expresado en la presentación de este proyecto que su ejecución será extremadamente cuidadosa con el entorno, pues garantiza la construcción de una planta totalmente hermética para evitar cualquier fuga durante la actividad.

La idea inicial es la de procesar unas 15.000 toneladas cúbicas de residuos orgánicos procedentes de aquellos municipios que se sumen en un radio de unos cincuenta kilómetros, lo que supone para entenderlo desde Vilanova al centro de Vigo.

Y es que la planta dará servicio a ayuntamientos de las provincias de Pontevedra y A Coruña, es decir los que se corresponden con el llamado Eixo Atlántico. El proyecto de Sogama para el tratamiento separado de los residuos orgánicos ya cuenta con una planta de idénticas dimensiones en Cerceda y prevé también la construcción de otras dos, de menores dimensiones, en las provincias de Ourense y Lugo.

La inversión en estas plantas de residuos viene motivada por las directrices de la Unión Europea en materia medioambiental para la transformación de orgánicos en compost natural, fertilizantes que luego se trasladarán al mundo agrícola y de jardinería, preferentemente.

Y ello va a suponer que todos los ayuntamentos que se sumen a la iniciativa de Vilanova tengan que pensar en la instalación en sus calles de los contenedores de color marrón, destinados exclusivamente a los restos de comidas, servilletas blancas u otros residuos de carácter orgánico.

Ahorro en transporte

En fuentes municipales se estima que estos residuos conforman un 40% aproximado de lo que se deposita en los contenedores verdes ordinarios, un peso que se verá reducido en el transporte y coste hasta Cerceda.

También es de subrayar el hecho positivo de que la planta de Sogama en Vilanova va a generar una decena de puestos de trabajos directos y otros tantos indirectos, en un momento crucial por la falta de empleo a nivel general debido a las últimas crisis económicas.

Cabe señalar que en la provincia de Pontevedra ya hay varios ayuntamientos asociados al plan Revitaliza de la Diputación que lleva algunos años con su plan de compostaje tanto a nivel particular como con la instalación de algunos recipientes comunitarios en las zonas más pobladas.