Las negociaciones abiertas desde hace meses para intentar salvar a la conservera Thenaisie Provote de una muerte segura están rotas en mil pedazos, como lo están las esperanzas de los trabajadores.
El proceso negociador se ha truncado y deja importantes daños colaterales por el camino, como la pérdida de peso de la marca conservera en los mercados e incluso el enfrentamiento existente a lo largo de las negociaciones entre los sindicatos CIG y CC OO; un distanciamiento que trataron de disimular pero que ahora queda claramente puesto de manifiesto.
Pero lo verdaderamente importantes es que, ahora mismo, Thenaisie Provote está herida de muerte. O puede que ya lo estuviera desde el principio, pues en CIG consideran que la verdadera pretensión del grupo rumano Scandia Food, el actual propietario, no es otra que liquidar la empresa.
Dicho de otro modo, que hay que empezar de nuevo. Pero no desde la posición de partida, sino en peores condiciones que nunca, puesto que cada día que pasa el barco de Thenaisie Provote se hunde más.
Por eso ayer se rompieron las negociaciones que parecían la única luz al final del túnel, personificada en la figura del empresario vigués Alfonso Caneiro, para muchos la última esperanza.
Estaba dispuesto a hacerse con las riendas de la conservera asentada en O Grove y su centro logístico en Mos. Quería comprar la propiedad a Scandia Food. Pero todo se ha ido al traste.
Así lo confirmaban en la Consellería de Economía tras la reunión celebrada ayer en la sede compostelana del Instituto Galego de Promoción Económica (Igape), con participación de este departamento y representantes de la parte vendedora, la compradora, los trabajadores y los sindicatos.
“Desde la Xunta seguiremos trabajando en la misma línea que mantuvimos hasta ahora, tratando de encontrar una solución industrial de continuidad”
Era una reunión decisiva, otra más, y como las anteriores, acabó mal. “Finalmente no hubo acuerdo y se rompieron las negociaciones”, explicaban en la Consellería antes de asegurar que “desde la Xunta seguiremos trabajando en la misma línea que mantuvimos hasta ahora, tratando de encontrar una solución industrial de continuidad” que salve Thenaisie Provote.
"Solo piensa en liquidar Thenaisie Provote, de ahí que se empeñara en criticar y rechazar el plan de viabilidad”
No será fácil, sobre todo si es cierto lo que sostiene CIG, donde creen demostrado que “no existe voluntad de llegar a un acuerdo para vender la empresa”.
Tanto es así que el director del Igape preguntó a los propietarios –que intervinieron por videollamada– por la posibilidad de que Caneiro pudiera conocer el estado real de Thenaisie “y el representante del grupo rumano contestó que no”, denuncian en la CIG.
Condiciones “inasumibles” que consideran “un chantaje”
Los intentos de Alfonso Caneiro por adquirir Thenaisie Provote y reflotarla parecen haber llegado a su fin porque la actual propietaria, Scandia Food, pone unas condiciones “inasumibles”.
Así lo entiende CIG, que pone como ejemplo que “piden que el inversor se haga cargo del concurso de acreedores y que venda todo el stock existente al precio fijado por Scandia, que se reserva además el derecho de adquirir producto por valor de 50.000 euros, pero con una rebaja del 50% con respecto a ese precio fijado por ellos mismos”.
Así lo denuncia la sindicalista Rosa Abuín, quien define este requisito como “un chantaje puro y duro”.
El grupo rumano “solo quiere liquidar”
Rosa Abuín insistía ayer en que la intención de CIG en todo este proceso fue, y sigue siendo, “mantener la actividad de la empresa y todos los puestos de trabajo”.
Nada que ver, a su juicio, con las pretensiones del grupo rumano, “que solo piensa en liquidar Thenaisie Provote, de ahí que se empeñara en criticar y rechazar el plan de viabilidad” presentado por Alfonso Caneiro, a quien el sindicato considera “la solución, no el problema”.
Máxime cuando la suya es una propuesta avalada por la patronal conservera, Anfaco.
CIG y el “silencio cómplice” de CC OO
En FARO DE VIGO ya se advirtió el pasado mes de julio de que los sindicatos implicados en el proceso negociador, CIG y Comisiones Obreras (CC OO), mantenían posiciones cada vez menos concordantes.
Es más, se apreciaba ya entonces una clara división en cuanto al modo de abordar las negociaciones para salvar la conservera de O Grove.
Es cierto que trataron de guardar las apariencias, pero también que ayer esa frágil relación que mantenían en torno a Thenaisie se rompió definitivamente.
Prueba de ello es que CIG abandonó la mesa de negociación “tras comprobar que el concurso de acreedores fue diseñado con la única intención de liquidar la empresa”. Y esto sucedió, sentencia, “con el silencio cómplice de CC OO”.
