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La pandemia eleva en Vilagarcía la demanda de teleasistencia de mayores que viven solos

Los familiares reducen las visitas por miedo a sufrir Covid sin síntomas y contagiarlos | Los convenios de Cruz Roja con Xunta y Concello suman 88 usuarios | Pilar Méndez: “Tenemos más llamadas de acompañamiento”

Los voluntarios de Cruz Roja acuden a los domicilios para comprobar que el sistema funciona bien y hacen compañía al usuario. | // CEDIDA

Hay plataforma, colgante o pulsera para activar la llamada. | // CEDIDA

Pilar Méndez es la coordinadora provincial de Cruz Roja. | // CEDIDA

La Xunta proporciona el servicio de acompañamiento telefónico a personas con dependencia reconocida, mientras que el Concello lo sufraga en otros casos, como vecinos dependientes a la espera de ser valorados u otros autónomos que necesitan teleasistencia temporal por otros motivos.

Funciona 24 horas al día, los 365 días del año. Siempre hay alguien al otro lado de la línea. Se trata del servicio de teleasistencia de Cruz Roja, que en Vilagarcía cuenta con 88 usuarios entre los convenios que la entidad mantiene con la Xunta (74) y con el Concello (14). La mayoría de ellos son personas mayores que pasan mucho tiempo sin compañía, ya sea porque viven solos o por razones laborales de sus familiares convivientes.

La pandemia de coronavirus ha incrementado la demanda de la teleasistencia, tanto en el número de usuarios, tal y como confirma el Ayuntamiento vilagarciano, como en la cantidad de llamadas. “Los usuarios llaman más a menudo, y es normal, porque están más solos. No los pueden visitar los familiares porque van al trabajo, a la compra, y tienen miedo de tener el Covid sin síntomas y contagiar a la persona mayor. No van tanto a verles y las personas mayores lo acusan. Tenemos más llamadas de acompañamiento, no de emergencias”, señala la coordinadora provincial de Cruz Roja, Pilar Méndez.

Explica que el sistema consiste en una plataforma, colgante o pulsera (a elección del usuario) en el que con pulsar un botón se activa la llamada (en modo manos libres) a la central de Cruz Roja. “El usuario explica lo que le pasa, si se ha caído o se encuentra solo y un poco deprimido... Si es una emergencia sanitaria nos ponemos en contacto con el 112, que valora si tiene que ir la ambulancia al domicilio. Si ocurre algo así nos ponemos en contacto con la familia o aquellos contactos de confianza que la persona nos haya dado. En principio pedimos dos, porque puede ocurrir que uno esté trabajando y falle. Solo solemos encontrar uno que tenga llave de la vivienda”, relata Méndez.

Medicación y cumpleaños

Después de la atención médica, desde Cruz Roja llaman tanto al usuario como a la familia para realizar un seguimiento y comprobar que todo está bien. “Tenemos agendas de seguimiento, si las personas quieren, para recordarles su medicación; también una de cumpleaños para felicitarlas, así como otra de seguimiento trimestral, o a veces más a menudo dependiendo de la situación de la persona”, indica la responsable provincial de la ONG.

Asimismo el servicio de teleasistencia cuenta con voluntarios de acompañamiento que acuden al domicilio de los usuarios que lo desean y realizan un seguimiento del terminal. “Si no funciona nos da una señal de alarma, pero a veces por desconexión de la línea telefónica puede permanecer inactivo un tiempo y la persona no darse cuenta. El voluntario realiza una llamada a la central para comprobar el sistema y habla con la persona para valorar si necesita algo”, detalla Pilar Méndez.

Para poder ser usuario del servicio de teleasistencia es necesario ser mayor de 65 años y vivir solo, con otra persona de avanzada edad o bien con familiares pero que estén poco tiempo en casa y esa persona pase mucho tiempo sola. “Debe escuchar bien, aunque sea con audífonos, y tener las suficientes capacidades intelectuales para hacer uso del dispositivo”, concretan desde Cruz Roja.

También pueden ser beneficiarios del servicio menores de 65 años con una enfermedad crónica que necesiten “estar controlados en determinadas actividades de su vida diaria”.

La coordinadora de la entidad recuerda que este servicio lleva muchos años implantado en Vilagarcía, contando con la fidelidad de los usuarios: “Hay mucha movilidad de personas que se dan de baja porque empiezan en un centro de día o se van a vivir con algún familiar, a una residencia porque se hacen más dependientes... Pero mientras están en sus domicilios, no suelen pedir la baja”.

Desde el Concello apuntan que en los últimos meses se ha registrado un repunte de demanda, si bien todavía quedan 46 plazas libres gracias a una reciente ampliación de oferta (a 60).

Ya no es necesario tener teléfono fijo en casa para contar con este servicio

Hasta hace poco para contar con el servicio de teleasistencia de Cruz Roja era necesario tener telefonía fija en casa. Pero desde el año pasado ya no es así, pues la entidad ha puesto en marcha la plataforma GSM que ya lleva internet incorporado. La coordinadora provincial, Pilar Méndez, admite que el servicio con GSM es más caro que con telefonía fija para los usuarios privados (los que reciben el servicio sin ningún organismo público de por medio), “pero en el caso de convenios se llega a acuerdos con las administraciones”. En Vilagarcía el convenio es de teleasistencia fija, y por el momento “no ha habido solicitudes de GSM”, si bien “es un tema que tendremos que tratar”, avanza Méndez.

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