La asociación comarcal de ayuda a discapacitados Anduriña vuelve a colaborar con el Concello de O Grove para mejorar la accesibilidad. En esta ocasión se colocaron carteles disuasorios y de concienciación en las plazas de estacionamiento reservadas a personas con movilidad reducida en centro urbano de la villa.
Son carteles “con mensajes claros sobre los perjuicios que provoca ocupar estos espacios de un modo inadecuado”.
El edil Juan Outeda resalta que es “una iniciativa que empezó aplicándose en doce calles” y alcalde apostilla que “se reforzará el control que realiza la Policía Local sobre el correcto uso de estas zonas reservadas, ya que se ha observado, que hay que seguir trabajando en la concienciación de la ciudadanía y, si es preciso, a través de la imposición de sanciones”.
En cualquier caso, el ejecutivo socialista insiste en pedir apoyo a los vecinos para que se conciencien y respeten las normas tendentes a facilitar el día a día a quienes padecen diversidad funcional.
Aprovecha para destacar “la importante labor que realiza Anduriña en la integración y visibilización de las personas con necesidades especiales”.
