Agentes de la Policía Autonómica, en colaboración con Gardacostas, investigan a 13 personas por furtivismo y delitos contra la salud pública en la ría de Arousa en el marco de la “Operación Aixam” que se activó el pasado mes de marzo.

Durante el estado de alarma se observó un incremento significativo de furtivos en playas de Boiro, Cabo da Cruz y Rianxo que disponían de un canal para la venta de marisco y, después de varios operativos, se localizó a un comprador que lo introducía de manera presuntamente fraudulenta en la cadena alimentaria.

Esta persona compraba la almeja extraída por los furtivos para trasladarla en un ciclomotor a un parque de cultivo de su propiedad, en Carril, explican.

Allí, añaden, “sumergía este marisco en el agua para impedir que muriese y después, lo vendía en la lonja como si fuese criado por él sin ningún tipo de trazabilidad ni medida higiénica”.

La operación concluyó cuando los agentes sorprendieron a esta persona en el interior de la lonja de Carril, donde supuestamente comercializaba 27 kilogramos de almeja. Como resultado de esta operación, el hombre de la lonja de Carril está investigado por presuntos delitos contra la fauna y la flora, receptación y contra la salud pública.

Añaden los agentes que en un estudio realizado se observan entradas anuales de 3.500 kilogramos en la lonja de Carril solo de almejas japónicas a nombre de esta persona. Además, hay una docena de personas investigadas por furtivismo, la mayor parte de ellas, vecinos de la comarca de Barbanza. También se identificó a 30 personas y se inspeccionó un vehículo. Todas las diligencias abiertas en esta investigación han sido remitidas a un juzgado de Ribeira para que instruya el caso.

La operación se enmarca dentro de las acciones que la Policía Autonómica realiza para erradicar el furtivismo e identificar a las personas que retiran marisco de las playas de manera ilegal, causando un grave perjuicio económico a los mariscadores.