Malestar en el colegio de Vilaxoán por la gestión del Sergas de un positivo en Covid

El colegio recibió el sábado la notificación -por parte de la familia- de que un alumno del último curso de Infantil había contraído el coronavirus.

De inmediato el centro intentó ponerse en contacto con el Sergas a través de los teléfonos y dirección de correo electrónico facilitados, pero no fue sencillo. “En los teléfonos sale el buzón de voz y en el mail la bandeja de entrada está llena, por lo que no reciben los mensajes”, comenta la secretaria, que advierte de las grandes dificultades para comunicarse con Sanidade.

Tras varios intentos, finalmente lograron hablar con una persona del Sergas, que “nos recomendó una cuarentena preventiva del aula durante toda la semana”. La secretaria del colegio recuerda que estamos hablando de un aula de Educación Infantil. Por lo tanto los niños no tienen permanentemente puesta la mascarilla y, además, se distribuyen en mesas grupales, como en muchos otros centros en esta etapa educativa.

Ante la recomendación del Sergas, el colegio envió una circular a las familias del aula afectada para informarles de lo sucedido y de que a partir del lunes no llevasen a sus hijos a clase.

Nueva indicación

Pero al día siguiente, el domingo, a las nueve y media de la noche, el equipo directivo recibió una llamada del Servizo de Alertas Epidemiolóxicas para conocer algunos detalles, como por ejemplo el último día que el alumno infectado había ido al colegio. Había sido el martes, por lo que al pasar más de 48 horas entre esa fecha y la del diagnóstico (el sábado), el Sergas considera que sus compañeros de clase y la profesora no son contactos estrechos, según explica la secretaria del CEIP Vilaxoán. “Nos dijeron que los niños viniesen el lunes con normalidad a clase”, relata sorprendida.

Pero entre la comunidad educativa hay preocupación, por lo que algunas familias decidieron no llevar a sus hijos al colegio por precaución y les pagaron la prueba del Covid en la sanidad privada.

También la tutora se costeó de su bolsillo la PCR para volver tranquila a dar clase después de haber estado en contacto con el alumno que había dado positivo.

Pero la historia no acabó aquí. Para sorpresa de los profesores y padres del colegio vilaxoanés, los rastreadoras comenzaron esta semana a llamar a algunas familias para someter a sus hijos a la prueba del Covid. “Es un despropósito. Primero nos dicen que hagamos una cuarentena preventiva, después que no, que mantengamos el aula abierta, y ahora están haciendo pruebas a algunos compañeros de la clase. Nosotros nos enteramos por las familias”, cuenta la secretaria del centro de enseñanza pública. Recuerda que en otros colegios de Vilagarcía, como fue el caso de Carril, “hubo un positivo y se mandó confinar a toda el aula, y era de Primaria”. En Vilaxoán es una clase de 25 alumnos de 5 años, que continúa abierta.

25 casos en educación

En el listado que diariamente la Consellería de Sanidade envía a los medios de comunicación con los centros educativos que tienen casos de Covid no aparece el de Vilaxoán, pero sí otros que suman 24 positivos. Así, ayer se incorporó a esa lista la escuela infantil municipal de Vilanova, donde la detección de un caso de coronavirus ha obligado a cerrar un aula.

En ese municipio hay más contagios: cuatro en el CEIP Viñagrande-Deiro, tres en el San Bartolomé, dos en el IES A Basella y cuatro en el Faro das Lúas. En total, catorce positivos.

En Vilagarcía el Sergas contabiliza ocho casos, todos ellos en institutos. Se trata de tres contagios en el Castro Alobre, otros tantos en el Armando Cotarelo Valledor y dos en el Fermín Bouza Brey. En el CEIP de Mosteiro, en Meis, se mantiene un caso activo, y en el IES Francisco Asorey de Cambados, también uno. La única aula confinada en toda la comarca de O Salnés es la de la guardería de Vilanova.

Contagiado un trabajador de la residencia Divina Pastora