El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de Vilagarcía investiga un vertido de purines que supuestamente procede de una granja porcina y que fue descubierto en el río Cañón, en la parroquia de Lois de Ribadumia.

Los hechos fueron denunciados por un vecino que a mediodía alertó a los agentes tras observar una mancha de considerable tamaño en el cauce fluvial del que manaba un fuerte olor pestilente.

A la zona acudió una patrulla de la Guardia Civil que además de tomar muestras trata de averiguar su procedencia, aunque todo apunta a una granja de cerdos existente en las proximidades de la parroquia ribadumiense.

Este tipo de vertidos es bastante frecuente debido a las deficientes infraestructuras de desagüe en viviendas e industrias, pero causan daños muy relevantes en el ecosistema natural, de ahí que sean muy perseguidos.

Los efectivos del Seprona comprobaron en la mañana de ayer que el enorme vertido de aguas fecales solo podría proceder de una granja de cerdos próxima, por lo que han iniciado un expediente que puede culminar con la imposición de fuertes multas por supuesto delito ecológico.

Este tipo de manchas en los ríos suelen tener importantes consecuencias para la fauna y flora de los entornos naturales que resultan afectados.