Bastó un puñado de adolescentes -los de cuarto curso- y apenas dos horas de trabajo voluntario en un reducido espacio de terreno para demostrar que la basura marina es una lacra ambiental; grave problema de repercusión mundial que tiende a empeorar, arrasando cualquier mar y costa del planeta e invadiendo playas y cordones dunares.

Esos estudiantes, pertenecientes al IES As Bizocas, en San Vicente de O Grove, lo comprobaron con sus propios ojos y lo combatieron con sus propias manos, en la playa de Area da Cruz.

Fue allí donde, acompañados de algunos profesores, se sumaron a la jornada de limpieza simultánea de playas organizada en la comunidad por la Asociación para la Defensa Ecolóxica de Galiza (Adega).

Sobre la arena o enterrada en ella

El objetivo era eliminar basura, aunque fuera una ínfima parte de la que se ve obligado a engullir el mar. Y no les hizo falta mucho, ya que sobre la arena, enterrados en ella, entre las rocas de la zona intermareal o escondidos en la vegetación dunar se toparon todo tipo de desperdicios.

Nada menos que cien kilogramos de porquería, según indican desde el IES de San Vicente los responsables de su programa medioambiental el Natur Bizocas.

Pocos residuos susceptibles de ser reciclados

De toda esa basura apenas se pudieron depositar 10 kilos de botellas de plástico -alrededor de ochenta unidades- en el colector amarillo, para facilitar su posterior reciclaje.

Lo demás eran colillas -sacaron de la arena 63-, tapones (73) y alrededor de 130 cuerdas, además de 83 palillos empleados en las cuerdas de cultivo de mejillón en batea.

No faltaban en la playa de Area da Cruz 103 bastoncillos de los empleados en higiene personal, junto con multitud de plásticos de diversos tamaños.

Incluso fueron desenterrados los restos de un recipiente de plástico de gran tamaño y varias barras metálicas.

Impacto ambiental

Fueron, en definitiva, unos 90 kilos de material plástico que no es susceptible de ser reciclado y se envía a la incineradora de Sogama, "con el impacto ambiental que esto supone también", lamentan en el instituto meco.

Area da Cruz es así una playa un poco más limpia. Aunque lo más importante es que los jóvenes se conciencien de lo mucho que aún les queda por hacer.