Mientras la Consellería de Educación sigue sin dar señales de vida, los padres del CPI Mosteiro mantienen el pulso y, en la segunda jornada de colegio, tan solo cuatro de los 250 alumnos acudieron al centro. Desde que se registró el positivo de un profesor, los padres no han tenido ninguna comunicación por parte de la Consellería, por lo que han dado el paso de enviar un escrito a la Jefatura Territorial de Educación en la que denuncian el "caos" que se vive en el centro y solicitan el aplazamiento del inicio del curso.

Ese comienzo no debería ser antes de que se cumplan una serie de condiciones, como son la confirmación de PCR negativas en todo el personal del centro o la adopción de las medidas oportunas en el caso de nuevos positivos; finalización de las modificaciones necesarias en las instalaciones del centro a fin de que este se adapte al protocolo Covid-19 recomendado por la Xunta; y, sobre todo, confirmación de la desinfección integral del centro escolar.

Desde la ANPA A Capela dejan muy claro en su escrito que en ningún momento su intención es cuestionar las condiciones que hay que afrontar a causa de la Covid-19 a lo largo del curso, tan solo quieren "que se tomen las medidas oportunas y recomendadas en todos los protocolos sanitarios y que se apliquen en nuestro centro escolar, incrementando así las garantías y la seguridad con la que nuestros hijos acudirán este año al colegio".

Insisten en que si no se ha iniciado el curso escolar según lo previsto ha sido por decisión de los padres de alumnos ante "la alarma sanitaria creada y la falta de medidas al respecto".

El Concello de Meis también se ha unido a este escrito, tal y como reconocía la alcaldesa, Marta Giráldez, explicando que "los padres solo piden que el curso se inicie en condiciones de seguridad, algo que no está ocurriendo en estos momentos en el CPI Mosteiro". La regidora lamenta que Educación no haya dado los pasos adecuados para intentar solucionar esta situación, insistiendo en que "entre los padres existe un rechazo absoluto a enviar a sus hijos al colegio, como demuestra el hecho de que el transporte escolar llegó totalmente vacío y solo cuatro niños acudieron al centro cuando debía comenzar todo el colegio".

Magariños

Otra de las preocupaciones surgidas en el inicio de este atípico curso escolar atañe al colegio Magariños, en Cambados. Los padres de los alumnos de sexto de Primaria demandan a la Consellería de Educación la dotación de un profesor para poder desdoblar los dos grupos actuales en tres. Según explican desde la Anpa, un aula cuenta con 25 niños y la otra con 24, es decir, que se encuentran en el límite de la ratio. "No hay que hacer ninguna obra, puesto que aula vacía para organizar un tercer grupo de alumnos ya existe. Solo nos tienen que enviar un profesor y se podrían hacer tres grupos de 15 alumnos", sostienen las familias.

Pero la Xunta no ha atendido la demanda de los padres y el curso comenzó ayer en sexto del Magariños con aulas de 24 y 25 niños. Pese a estar disconformes, las familias enviaron a sus hijos igualmente a clase.