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Bodegueros y viticultores ultiman los preparativos para la inminente vendimia

Los tractores empiezan a transportar las cajas mientras las instalaciones de recepción de uva se ponen a punto - En algunas fincas se acondicionan los viales de acceso

La uva está lista para ser recogida. // FdV

En el sector vitivinícola la actualidad gira ya exclusivamente en torno a la inminente vendimia, que ya empezó en zonas como Valdeorras. En algunas plantaciones familiares de la provincia de Pontevedra empezará a recogerse la uva esta misma semana, mientras que en denominaciones de origen tan importantes como Rías Baixas se hará desde el sábado y, sobre todo, se intensificará el ritmo desde mediados de la semana que viene.

De ahí que la actividad esté siendo intensa, tanto en los viñedos como en las bodegas, tal y como podía comprobarse ayer y como, a buen seguro, se hará notar en los próximos días.

Despejan el camino

En algunas plantaciones se procede también estos días a eliminar maleza bajo las parras y a adecentar los accesos, para así facilitar el paso de los jornaleros, carretas y tractores; los mismos vehículos que ayer se desplazaban ya a algunas bodegas de la comarca de O Salnés para recoger las cajas que ahora deben colocar en las plantaciones para empezar a recoger la uva.

Hay también viticultores que se afanan en la limpieza de esas cajas y ayer las trataban con mimo y tapaban con plásticos en sus huertas, a la espera de que sea el momento de trasladarlas a los lugares de recogida.

Protocolos Covid

Lo harán, la mayoría, siguiendo las instrucciones que les dicten las bodegas, donde no solo ultiman todo lo necesario en relación con las medidas de prevención que este año habrá que aplicar frente al coronavirus, sino que también despejan por completo las zonas de recepción de uva, que a partir del próximo din de semana serán el "punto caliente" de esta atípica recolección.

En algunas también llevan días haciendo sitio para la nueva producción procediendo a completar el proceso de empaquetado de botellas de la añada 2019, para de este modo sacarlas al mercado u otros almacenes.

Ni que decir tiene que todos están pendientes del cielo, para así planificar hasta el último detalle de la vendimia en función de las condiciones meteorológicas reinantes.

Como también lo están los enólogos y demás técnicos de cada bodega, quienes revisan en la vila prácticamente cada racimo, para así determinar la acidez, graduación y demás parámetros de una uva que, insisten, "goza de la máxima calidad".

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