Carril cerró anoche dos días de fiestas, aunque los vecinos no pudieron celebrarlas como de costumbre debido a la pandemia de coronavirus. Así, el sábado los carrilexos honraron a su patrón, Santiago Apóstol, con una misa cantada tras la que no hubo Danza das Espadas. Pero para no perder la tradición, media docena de farsantes realizaron un saludo al santo y el cura, Eduardo Amado, también participó en la representación.
Tras la jornada en honor al Apóstol, ayer los fieles veneraron a San Fidel, cuya reliquia se guarda en la iglesia parroquial y su celebración en la villa marinera atesora una tradición de más de doscientos años. Tuvo lugar una misa cantada al mediodía y por la noche la soprano Loli Crespo, acompañada del pianista Alejo Amoedo, ofreció un concierto en la Praza da Liberdade.
Este año no hubo actividades para los niños, como los tradicionales barcaños en los que los pequeños se lo pasan cada verano en grande en la playa de A Covacha, las cucañas (juegos tradicionales) ni los gigantes y cabezudos que recorrían las calles de Carril.
Este fin de semana festivo se celebraron un sinfín de actos en toda Galicia. En O Grove, el Concello festejó el Día de Galicia con diferentes actos socioculturales que culminaron con la actuación del cantante catoirense Roi Casal, quien llevó al escenario habilitado en O Corgo su espectáculo "Son galego, son cubano". Es un trabajo musical y cultural ya conocido en la comarca que se presentó en el Gran Teatro de La Habana en 2016. En el mismo, Roi Casal pone ritmo a algunas de las obras más populares del escritor gallego Neira Vilas.
Fue un día importante para los mecos y sus visitantes que se incluyó en la extensa programación de ocio diseñada por el gobierno local para este verano. La fiesta, como todos los actos que se llevan a cabo, se desplegó bajo intensas medidas de seguridad y prevención, para evitar contagios por coronavirus.
