El empresario muradano Antón Fernández, que goza de una destacada presencia en el negocio del cultivo del mejillón, donde explota cerca de cien bateas, es ya el propietario del 100% de las acciones de Paquito S.L.

Se trata de una empresa que nació siendo depuradora de moluscos, se adaptó al procesado de los mismos y siguió avanzando, con la fabricación de platos precocinados, congelados y refrigerados; siempre con el mejillón como estrella indiscutible, y sin perder de vista el rebozado de anilla de calamar.

Es una firma, dicho sea de paso, sobradamente conocida en Galicia que, fundada hace más de medio siglo, jugó un papel decisivo a lo largo de la historia del sector mitilicultor.

El exconseller valenciano de Economía, Máximo Buch

En su más reciente etapa, el 60% de sus participaciones pertenecieron al fondo de inversión Stator Management, del exconseller valenciano de Economía, Máximo Buch, el que fuera uno de los colaboradores destacados en el gobierno de Alberto Fabra.

El otro 40% de las acciones seguía desde entonces en manos de Francisco López Silva, el socio fundador de la planta depuradora.

Ahora, como queda dicho, la empresa asentada en Arousa Norte ha sido vendida al empresario gallego, para satisfacción del sector productor. Al menos así lo hace ver la Organización de Productores Mejilloneros de Galicia (Opmega), la entidad más representativa de los bateeiros.

Esta agrupación no solo se hace eco de la venta, sino que se felicita por el resultado de la operación, al tiempo que incide en que Paquito "se encuentra desde hace tres años en plena senda de recuperación tras la grave situación económica y financiera que atravesaba desde principios de la década".

La familia López Outeiral

Las mismas fuentes puntualizan que "fue en 2017 cuando el citado fondo de inversión tomó el control de la compañía, que hasta entonces estaba en manos de la familia López Outeiral, e inyectó los recursos necesarios para retomar la actividad, pactando además una reestructuración financiera que dotó de viabilidad a la empresa", apostilla Lino Suárez Blanco, director de operaciones de Opmega.

Después de tres ejercicios "encadenando notables crecimientos y recuperando la posición que en su día tuvo en el mercado del mejillón", ahora le llega el momento de una nueva y, parece, esperanzadora etapa.

Apoyo institucional

Para ello, destacan en Opmega, "ha sido clave el papel desempeñado por las instituciones autonómicas". Y citan como ejemplo que "Xesgalicia ha apoyado dicha reestructuración".

Al referirse a esta empresa, ubicada en el municipio arousano de Boiro, en la comarca de Barbanza, Opmega destaca que "con esta desinversión el fondo Stator culmina una exitosa operación, en la que no solo ha logrado salvar a la compañía y sus trabajadores de lo que parecía un inevitable concurso, sino que ha multiplicado su valor en tan solo tres ejercicios".

Bateeiro, depurador y comercializador

El nuevo propietario, que además de tener bateas está presente ya en el sector de la depuración y la comercialización en fresco, siendo actualmente "el mayor comercializador del mercado", da ahora un salto cualitativo a su proyecto.

Lo hace incorporando al mismo la actividad de transformación que le puede ofrecer Paquito S.L., capaz de manipular más de 30 millones de kilos anuales de molusco bivalvo.

17.000 metros cuadrados de parcela

Con una planta que ocupa 17.000 metros cuadrados, "Paquito parece el complemento ideal para la actividad que Antón Fernández viene desarrollando en los últimos años en una parte del sector en la que no tenía presencia, como es la transformación", sentencian en Opmega.

Y eso no es todo, sino que el empresario natural de Muros llega con "importantes planes de futuro" bajo el brazo y la intención de mantener los más de 80 empleos que tiene en la actualidad.

Incluso baraja la posibilidad de ampliarlos, "dado el ambicioso plan de crecimiento con el que desembarca en Paquito".