La corporación municipal de Vilagarcía dio ayer luz verde al plan financiero 2020/21 al que está obligado el Concello por haber incumplido la regla de gasto en base a la "Ley Montoro", una normativa que limita la capacidad de maniobra de las entidades locales a la hora de invertir el superávit y que muchos municipios consideran obsoleta. De hecho Marea da Vila llevó una moción a pleno solicitando su derogación, una propuesta que salió adelante con el apoyo de todos los partidos a excepción del PP, que sigue defendiendo la ley puesta en marcha por el ministro popular Cristóbal Montoro, que obliga a los ayuntamientos a dedicar la práctica totalidad del superávit a amortizar deuda.
Todos los grupos votaron a favor del plan financiero salvo BNG y En Común, que se abstuvieron en señal de protesta por la "Ley Montoro".
La portavoz de Marea da Vila, María de la O Fernández, expuso en su moción que esta normativa "es una atadura para los concellos, no solo en cuanto al superávit, sino también en contratación, limitando la reposición de puestos de trabajo, lo que lleva a reducir los servicios públicos y fomenta la privatización".
La Plataforma en Defensa da Cría expuso la problemática de la recolección de mejilla dentro de una moción de Ciudadanos que fue aprobada por mayoría.
La que se quedó en el tintero fue la moción del PP sobre el empleo en Alcoa, una propuesta "completamente electoralista" en opinión de la izquierda.