Los técnicos de la Mancomunidade retiran nidos en siete de los nueve municipios de la comarca (Vilagarcía y O Grove tienen servicio propio), y por término medio eliminan los avisperos entre 24 y 48 horas después de la llamada de alerta. Para ello, emplean varios métodos. Uno de ellos es el de disparar con un rifle bolas con veneno envenenado hacia los nidos. Ya llevan tiempo utilizando esta técnica, pero cada vez se emplea más porque es menos contaminante.

Con la pértiga clásica se inocula en los avisperos litro y medio de una solución venenosa, y con el rifle se utilizan 10 bolas con 20 centímetros cúbicos de veneno congelado. El impacto ambiental es por lo tanto mucho menor. Cuando el nido está en lugares inaccesibles -el año pasado, hubo doce casos-, se recurre a los drones.