Durante el pasado mes de abril un total de 150 autónomos en la comarca de Arousa han Galicia cerraron de forma definitiva sus negocios. Son 400 en la provincia de Pontevedra y 1.629 en el conjunto de Galicia, según los datos facilitados por UPTA. La mayor parte de la destrucción de empleo se concentra en los sectores de comercio, hostelería y construcción.

El presidente de UPTA, en vilagarciano Eduardo Abad, señala que "se esperaban estos datos en cuanto al número de autónomos que cerrarían sus negocios. Afortunadamente, el balón de oxígeno que ha supuesto el cese de actividad ha frenado una caída histórica. Pero cuidado, si el miércoles no se prolonga el estado de alarma, no tendremos las ayudas que nuestro colectivo ha conseguido a base de negociaciones con el Gobierno. Este escenario podría provocar una auténtica catástrofe, si desaparecen medidas fundamentales como el cese de actividad, la moratoria del pago de cuotas sociales y alquileres o de pago de préstamos, cambiará radicalmente la situación de los ERTE y sería una irresponsabilidad mayúscula. Los partidos deben ser consecuentes y responsables y tendrán que valorar las graves consecuencias que puede provocar la decisión de no prolongar el estado de alarma".