Más de un millar de trabajadores de la comarca de O Salnés dejan de desarrollar su labor y se van a casa con permisos retribuidos en base a la nueva orden del Gobierno del Estado, en un nuevo intento de contener el número de contagios de coronavirus. Están afectadas numerosas obras públicas, pero también industrias asentadas en los parques empresariales de la comarca relacionadas con el ámbito constructivo, como es el caso de la fabricación de los derivados del cemento, carpinterías, ebanisterías, fontanerías, electricidad que han sido calificadas como actividades no esenciales.
Las empresas tuvieron ayer una moratoria para finalizar algunos trabajos o asegurar otros que estaban en marcha, así como la paralización y custodia de maquinaria y herramientas.
Entre las principales obras públicas que se ven afectadas por esta orden figura la reforma integral de la Casa del Mar de Vilagarcía para acoger, no solo la sede de las dependencias de la provincia marítima de Vilagarcía de Arousa (ISM), sino también las oficinas del Instituto Nacional de la Seguridad Social, y del Servicio Público de Empleo Estatal, SEPE. La actuación, con un presupuesto de más de 7 millones de euros, comenzó el pasado año con un plazo de ejecución de 24 meses. Mientras tanto, el personal del ISM opera en unas oficinas provisionales arrendadas en la primera planta de las Galerías Gallego.
Otra obra paralizada es la urbanización de la calle Vázquez Leis para desesperación de sus vecinos. Los trabajos fueron contratados el año pasado por el Concello de Vilagarcía a la empresa Nexia que finalmente fue declarada en quiebra, por lo que la calle quedó semilevantada. Finalmente, la Administración municipal pudo contratar la finalización de esta actuación a otra empresa que comenzó a trabajar unos días antes de declararse la pandemia del coronavirus en España. Ahora las obras tendrán que volver a parar, al menos, hasta después de Semana Santa.
La urbanización de las calles del entorno de Fexdega, que también había sido adjudicada a Nexia en su momento, también fue contratada a otra empresa pero, en este caso, los trabajos no llegaron a comenzar.
Los que sí han tenido que aplazarse son los contratados por la Diputación de Pontevedra, en coordinación con los Concellos de Vilagarcía de Arousa, Caldas de Reis y Portas para la creación de la Vía Verde do Salnés, una senda peatonal y ciclista sobre un tramo en desuso del antiguo trazado ferroviario entre estos municipios.
La primera fase de esta actuación, que iba a estar finalizada en el transcurso de esta primavera, tuvo que ser paralizada y se retomará también después de Semana Santa.
También están afectados los trabajos de acondicionamiento de los Puntos Limpios de Vilagarcía de Arousa y de Meaño para la recogida de aparejos eléctricos y electrónicos, en marcados en el proyecto provincial "Estraee".
En materia de infraestructuras, otra actuación que se vio afectada es la mejora de la intersección mediante rotonda en la carretera EP-9101, punto kilométrico 5+150, en el término municipal de O Grove.
La Diputación de Pontevedra contactó ayer con todos los concellos de la provincia, en los que estaban en ejecución obras de los planes provinciales como "Plan Concellos", "Reequilibrio" o DepoRemse, a fin de recordarles a obligatoriedad del Decreto y la moratoria durante la jornada para adoptar medidas de seguridad y protección en la zona de los trabajos.
