Un despacho de abogados afincado en Poio ha puesto en marcha la bautizada como "Plataforma de afectados por el IVA de la venta de las bateas"; una herramienta mediante la cual se quiere agrupar al sector mejillonero gallego y "defender al sector frente a la Agencia Tributaria como un todo". Persigue, básicamente, acabar con la "alarma social" generada por el cobro del IVA de los viveros flotantes, dejando constancia de que la venta de estas concesiones, y con ella el relevo generacional, se han visto truncados a causa de la reclamación de ese impuesto a los productores.
"La multiplicación de casos en los que se reclama un IVA a posteriori sobre la venta de una batea ha generado gran preocupación en los expropietarios de bateas y en los compradores que en su momento hicieron la transacción de buena fe y cumpliendo la legislación", argumentan en la plataforma.
Representada por el abogado Álvaro Sáez, la firma "Sáez Law", impulsora de esta reivindicación, cree preciso "explicar nuevamente a Hacienda cómo funciona el sector mejillonero y por qué debe estar exenta la venta de sus bateas del pago del IVA", animando a participar en la plataforma a "todos los afectados que quieran regularizar su situación o que se encuentran en un proceso de reclamación" por el cobro del impuesto. Esgrime que, "de forma totalmente injusta", Hacienda "basa sus revisiones en varias consultas de la Dirección General de Tributos (DGT) que se han hecho desde Madrid, sin entender que una batea es una empresa que desarrolla una actividad económica autónoma".
A este respecto, sostiene que "reclamar el IVA por la venta de una batea no es de ley", a lo que añade que "el sector ya sufrió un fuerte varapalo hace algo más de 10 años con el cobro del IVA sobre el gasoil de las embarcaciones auxiliares, por lo que ahora debe pelear nuevamente y volver a explicar a Hacienda cómo funciona el sector y por qué debe estar exenta la venta de bateas del pago del IVA". Todo ello teniendo presente que "no solo el vendedor se puede ver afectado, ya que puede repercutir y cobrar el IVA al comprador, siendo este, finalmente el perjudicado, ya que el en casi el 90% de las ocasiones es otro bateeiro que no puede deducir el IVA".
