"Las voces que tratan de negar la existencia de la violencia de género, lo que hacen es perpetuarla, alejándonos de la solución". Fueron algunas de las palabras que ayer a mediodía pronunció en Ravella Ángeles Conde, miembro del Consello Local da Muller de Vilagarcía, dentro del manifiesto del 25-N aprobado previamente por toda la corporación municipal.

Decenas de personas, entre ellos el alcalde y varios concejales y concejalas del gobierno y de la oposición, se dieron cita en las puertas del consistorio enfundadas en las camisetas "Vilagarcía en negro contra as violencias machistas". Así, un años más la capital arousana se vistió de negro porque "a las mujeres nos siguen matando, las niñas y los niños quedan huérfanos y son a su vez víctimas de la violencia contra sus madres, y miles de mujeres sufren cada día las diferentes violencias que se ejercen contra nosotras por razones de género" -reza el manifiesto-, es decir, por el mero hecho de ser mujer.

Este está siendo un año "especialmente sangriento en España, con un mes de julio en el que fue asesinada una media de una mujer cada dos días", recordó Ángeles Conde. Fue además el año "de la triste efeméride de la víctima número mil desde 2003".

A diferencia de otros municipios, en Vilagarcía ayer se alzó una voz clara y unánime contra la violencia de género. La ciudad reclamó más personal formado en materia de igualdad de género, "sobre todo en fines de semana en comisarías y juzgados". Y es que "necesitamos de manera urgente una justicia con perspectiva de género", reivindicó Vilagarcía.

Con respecto a la educación, "reclamamos que su base sea la igualdad. Debemos concienciar, educar y construir una sociedad de mujeres y hombres libres porque en una sociedad libre ningún hombre se sentirá con derecho sobre la vida de una mujer", expresó la representante del Consello Local da Muller.

Las firmantes del manifiesto reconocen que "nuestra ciudad es apenas una piedra en el conjunto del Estado, pero seamos un ejemplo por el bien de las mujeres que vivimos en ella". "Nos queremos libres, vivas y alegres. Contra las violencias machistas, Vilagarcía en negro", proclamó Conde, recibiendo una sonora ovación por parte de los asistentes.

Este fue el mismo lema que desde hace días lucen comercios, locales de hostelería y otras empresas dentro de la campaña promovida por el Centro de Información á Muller (CIM) por el 25-N.