Acceder a Cambados en coche ayer a partir de las 18.00 horas se convirtió en una auténtica odisea. Toda la red viaria que rodeaba el municipio se encontraba colapsada, sobre todo, las VG 4.2 y 4.3, trasladándose al interior del casco urbano, donde aparcar el coche era prácticamente imposible. La masiva afluencia de personas también se notaba en las calles del municipio, sobre todo, las más próximas al paseo de A Calzada, donde la riada humana era espectacular. Desde que se inició esta edición de la Festa do Albariño la afluencia de visitantes ha sido espectacular y más se preveía esta noche pasada, ya que además de ser el día grande, también estaban los conciertos, como el de Siniestro Total en Fefiñáns.