Los niños fueron los protagonistas en las primeras actividades de las fiestas de San Fidel de Carril. Si por la mañana se instalaron hinchables y colchonetas en la zona portuaria, por la tarde llegó el plato fuerte de la jornada juvenil. En la playa da Covacha, los más pequeños pudieron disfrutar de dos de las actividades que más le gustan de este programa: la fiesta de la espuma y la tradicional regata de barcaños.
Cerca de 50 niños (la mayoría entre 4 y 8 años), enlazaron una actividad con otra para cerrar una completa tarde. La fiesta de la espuma empezó a las cinco y media y se extendió durante más de una hora, hasta el punto de solaparse con la "competición" marítima. Un cañón de espuma roció a los entretenidos niños que, después, retiraban los restos de jabón que quedaban en su cuerpo en la orilla del mar.
A esa misma orilla, la de la playa da Covacha, llegaron los seis barcaños que formarían la carrera. Estas pequeñas embarcaciones sirven como homenaje a las antiguas cajas de pescado en las que se subían los niños para navegar por las orillas de la ría. Actualmente, son cajas de madera perfectamente pulidas y, cada una, tiene su nombre como lo hacen todos los buques.
Acompañados por dos remos de madera caseros, dos jóvenes se subieron a cada uno de los barcos para comenzar la competición, que consistía en un pequeño recorrido de unos 20 metros de distancia hasta una boya que la organización había colocado y a la que tenían que llegar los competidores y dar vuelta para volver a la orilla.
Los doce afortunados que participaron en la primera carrera recibieron los ánimos del público, formado principalmente por los padres y familiares de todos los chavales que se habían acercado a la espuma y a las carreras. No sin esfuerzo, el primer barco, formado por un niño y una niña, llegó a la meta recibiendo la ovación. El resto de participantes, también fueron jaleados a la llegada.
La corriente del mar fue el principal inconveniente que se encontraron los competidores. A alguno le costó arrancar, mientras que otros sufrieron más dificultades durante el trayecto, ya que fueron varias las embarcaciones que se vieron volcar por culpa de las olas. Por suerte, todos los participantes salieron ilesos y la jornada festiva no tuvo que lamentar ningún tipo de incidente mayor.
Para llevar a cabo esta iniciativa, que nació con el objetivo de entretener a los más pequeños recuperando una antigua tradición y aprovechando la calidad de las playas de la zona, participan numerosos locales y establecimientos carrilexos, que se juntan para mantener vivas este tipo de costumbres.
La jornada del viernes, la primera de estas fiestas de San Fidel, se terminó con una actuación perteneciente a la vertiente parroquial del Festaclown. El show "Rogelio, un pallaso en recuperación", que dio comienzo sobre las 20.30 horas, sacó una sonrisa más a todos los presentes para cerrar, ahora sí, una jornada divertida y llena de diversión en Carril.
Las fiestas de la parroquia se extienden durante todo el fin de semana y dejan de lado ese enfoque infantil centrándose en un público más adulto. En la mañana de hoy, a las 11.00 horas, se celebra el pasacalles con gigantes y cabezudos y, a las 13.30, es turno de la romería en Cortegada. Por otra parte, a las 11.15 horas de mañana domingo, se celebra la procesión del traslado de la Virgen de Cortegada y el Apóstol Santiago. Las noches del sábado y del domingo tendrán una nota musical con verbenas y actuaciones de grupos y orquestas los dos días.
