El alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, calcula que el contrato de la recogida de basura y limpieza viaria podrá sacarse a concurso este año, aunque debido a la complejidad del proceso, la adjudicación podría demorarse hasta mediados de 2020, según anunció ayer el primer edil después de consultar con los servicios jurídicos. Estos son los plazos que maneja el Concello para su contrato de mayor envergadura, el cual ronda los 3 millones de euros anuales.
Una empresa del Eixo Atlántico es la encargada de elaborar los pliegos y está terminando de redactarlos. Se trata de una tarea con "una gran dificultad técnica", de ahí el retraso que acumula el concurso de la recogida de residuos de Vilagarcía, cuya concesión expiró en 2018 después de tres años de prórroga autorizada por el gobierno del PP en 2015. Ni en el mandato de Fole ni tampoco en el primero de Varela se licitó el millonario contrato, por lo que el año pasado los socialistas, con los apoyos del BNG y de Miguel Alves, aprobaron la continuidad del servicio por parte de Cespa-Ferrovial sin establecer un plazo determinado. Y es que el pliego no estaba acabado y la ciudad no podía quedarse sin servicio de recogida de basura (ni tampoco de limpieza de calles).
En el Presupuesto municipal de 2019, el ejecutivo de Varela prevé un gasto en este servicio de 3.029.461,92 euros, mientras que los ingresos bajan a 2.895.247, por tanto estamos hablando de un servicio deficitario.
El coste estimado se incrementa en más de 130.000 euros con respecto al año anterior, una cantidad que según explica el alcalde, se reserva "para una posible revisión de precios" que suelen pedir las empresas, por ejemplo, para afrontar una subida salarial de su plantilla. Varela desconoce si Cespa este año va a solicitarla o no, "pero tenemos que prevenirlo", apunta.
26 años de Cespa
Cespa lleva 26 años al frente del servicio de la recogida de basura y limpieza de calles en Vilagarcía. El pleno acordó el 11 de marzo de 1993 adjudicarle el contrato durante una plazo de diez años. En aquel momento todavía funcionaba como Ingeniería Urbana S.L. (Inusa).
En el verano de 1997 los grupos de la Corporación acordaron ampliar el servicio al parque de Compostela por un importe cercano a las 924.000 pesetas anuales, así como a diversas calles y parques (O Castriño, paseo marítimo, ...) por importe de 3,4 millones de las antiguas pesetas.
En 2000 se procedió de nuevo a una reestructuración de los servicios de la concesión con una ampliación del contrato, hasta el 2 de julio de 2015.
En junio de 2009 el pleno volvió a dar el visto bueno a una modificación de la concesión de los servicios de recogida y transporte de basura y limpieza viaria, consistente en el incremento de personal, maquinaria e incorporación de nuevas zonas de la ciudad, lo que implicó un incremento del canon anual en 381.558,20 euros anuales.
Con fecha 23 de octubre de 2014, la concesionaria solicitó la prórroga del plazo de duración del contrato por "el periodo máximo posible" sin incremento del canon y con la incorporación de determinados servicios. El gobierno vilagarciano en aquel momento, del PP, aceptó la propuesta de Cespa, limitando la prórroga a tres años al no ser posible legalmente un periodo mayor según el informe de los técnicos municipales.
A cambio de la prolongación de la concesión en 2015, la empresa amplió sus zonas de limpieza a los parques de A Coca, Cavadelo, Centenario, Miguel Hernández y zona TIR. También asumió la retirada de los restos del botellón los sábados, domingos y festivos en estos espacios y en el entorno del Auditorio y la playa de A Concha.
