Xoán Castaño debutó ayer como alcalde. El congreso sobre inmigración desplegado en el Auditorio Municipal de Catoira se convirtió en su primer acto institucional. Y lo inauguró reconociendo que acaba de "aterrizar en este cargo de responsabilidad" y que es una "satisfacción especial" para él recibir a "entidades y personas que deciden poner encima de la mesa cómo aspectos de género inciden en un colectivo tan vulnerable como el de los inmigrantes y refugiados".

El regidor nacionalista resaltó que "la vulnerabilidad aumenta con el componente de género" y que "ser inmigrante o refugiado supone estar en riesgo de exclusión". Y si el inmigrante o refugiado es mujer "su situación se agrava", proclamó con pesar el primer edil, quien mostró su deseo de que el seminario celebrado en Catoira contribuya a mejorar la situación de estas personas, dejando patente que el trabajo de los congresistas y otras personas y colectivos como ellos "es imprescindible para lograr una sociedad que avance junta hacia la igualdad y la justicia social".