La campaña electoral de las elecciones generales, si bien no ha comenzado oficialmente, ya está dejando imágenes de lo mas curiosas. Una de ellas fue la que se produjo en los últimos días en Vilagarcía y más concretamente en la Praza de Galicia con dos jóvenes vilagarcianas como protagonistas de una particular e ingeniosa muestra de oposición a una ideología política, concretamente en este caso la que identifica a Vox.

Carolina Pedrido y Ana Mariño, con la colaboración a la hora de tomar la instantánea de Menchu Rivas, fueron las que idearon una imagen que se ha convertido en uno de los acontecimientos de los últimos días en las redes sociales con un gran impacto en cuanto a visualizaciones y apoyos generados.

Son muchas las opiniones que apuntan sobre el beso entre las jóvenes que se trata de una clara muestra de la esencia de la democracia y de como pueden convivir dos maneras de ver las cosas sin enfrentamientos. También son muchos los que ponen en valor la valentía mostrada por las dos arousanas como una representación inteligente de rechazo a las maneras de pensar respecto al colectivo homosexual que tiene la nueva formación liderada por Santiago Abascal.

La manera de mostrar rechazo sin expresar violencia alguna se produjo cuando Vox había instalado un puesto en Vilagarcía para dar a conocer sus bases programáticas de cara a las próximas elecciones generales del 28 de abril. Fue ahí cuando Ana, Carolina y Menchu dieron rienda suelta a su modo de protesta para luego utilizar el altavoz de las redes sociales para amplificar el sentido de su reivindicación con una imagen que no tardó en viralizarse.

El rechazo a los derechos del colectivo homosexual manifestados por Vox ha derivado en una protesta que Ana Mariño cataloga como "un acto reivindicativo por la defensa de nuestros derechos, y no solo por pertenecer al colectivo LGTBI, sino en general. Debemos protestar y rechazar las ideas de un partido que desde nuestro punto de vista son erróneas. Ideas que nos están oprimiendo en todos los sentidos. Con propuestas en las que se niegan a reconocer el matrimonio entre dos personas homosexuales o la estructura heteropatriarcal que tienen de la familia y por como se nos pretende oprimir por el hecho de ser mujeres".

Las distancias ideológicas entre las propuestas de Vox y el colectivo LGTBI se están convirtiendo, no solo en motivo de debate, sino también en fuente de inspiración de protestas como la que tuvo lugar en Vilagarcía con estas dos chicas como protagonistas besándose delante del puesto instalado por la nueva formación política para recabar apoyos en el que será su estreno democrático en las urnas el próximo 28 de abril.