Además de las guardias unipersonales, los agentes de la Policía Local llevan mucho tiempo desempeñando su trabajo en unas condiciones ínfimas debido a la situación en la que se encuentra la sede, situada en los bajos del Concello. Constantes humedades, filtraciones de agua debido a la falta de impermeabilidad del edificio en esa zona y un lugar poco adecuado para cambiarse son solo los problemas más importantes que existen.

El Concello se comprometió hace tiempo a solventar la situación cuando las condiciones meteorológicas lo permitiesen, pero ese compromiso se ha ido dilatando en el tiempo sin que se acometa la obra. Sobre la situación en la que se encuentra la comisaría de la Policía Local también se han pronunciado otras formaciones políticas sin éxito. El servicio de Policía local es uno de los mejor valorados por los ciudadanos, como quedó demostrado cuando un grupo de vecinos recogió firmas en el casco urbano de Vilanova cuando se suspendió el servicio por las tardes debido a la falta de agentes. Un refuerzo en la plantilla a corto y medio plazo tampoco se contempla.