La búsqueda de Guillermo Casais, el marinero desaparecido tras el naufragio del Sin Querer Dos, ha entrado en una segunda fase, a la espera de que se cumpla una semana del accidente y vuelvan a intensificarse las tareas de rastreo.

Será a partir del miércoles cuando vuelva a la zona el grueso de medios aéreos y marítimos. Durante la jornada del sábado estuvo sobevolando el área el avión Sasemar 102, y ayer mismo estuvo en la zona un helicóptero de Gardacostas de la Xunta desde las 10.30 horas de la mañana. Mientras tanto, una treintena de personas participan en las batidas desde tierra.

Durante los próximos días, Salvamento Marítimo mandará nuevos avisos a los navegantes y pescadores de la zona, para que estén atentos, y tendrán especialmente presente el área de desaparición de las víctimas durante sus misiones de vigilancia y ejercicios habituales. Asimismo, enviarán previsiones a los equipos de tierra sobre corrientes y mareas, para que estos sepan donde focalizar su trabajo cada día. En caso de que se produjese algún hallazgo, el operativo volvería a montarse con los medios de los primeros días.

Así las cosas, la previsión de Salvamento es dar un nuevo impulso a la búsqueda a partir del noveno día después del siniestro -que en el caso del Sin Querer Dos se cumple el jueves-, con el despliegue completo de medios marítimos y aéreos. Entre tanto, se mantiene el operativo por tierra. También en este caso, los equipos están organizándose para intensificar su presencia en el litoral a partir del miércoles, que es cuando se cumple la semana de la tragedia.

El Sin Querer Dos es un barco del cerco de Portonovo que se hundió a mediados de la semana pasada frente a la Costa da Morte con diez hombres a bordo. Tres de ellos murieron, y uno permanece desaparecido. Se trata de Guillermo Casais, un cambadés de 44 años, casado y con dos hijos.

Las actuaciones de búsqueda durante las primeras jornadas han estado marcadas por el mal tiempo, lo que se ha traducido en días de mucho oleaje y poca visibilidad. El sábado incluso estuvo a punto de suspenderse el operativo por la meteorología adversa, pero a última hora de la mañana el tiempo dio una tregua y pudo salir el avión.

Por tierra

Las batidas por tierra cubren gran parte de la costa oeste central de la provincia de A Coruña. Solo entre el monte Ézaro y la localidad de Noia hay unos 70 kilómetros de litoral, y hay unas 25 personas desplegadas.

Se trata de un operativo en el que participan agentes de la Guardia Civil, la Policía Local, Protección Civil y los Grupos de Emerxencias Supramunicipais (GES) de varias localidades.

El GES de Muros, por ejemplo, realiza búsquedas diarias por zonas de la costa que se van demarcando, y en las que se alternan extensos arenales como el de Carnota, de ocho kilómetros de longitud, con tramos escarpados y de acantilados, de acceso complejo.

Fuentes consultadas manifiestan que por el momento no han salido a flote o han aparecido en tierra restos de la embarcación o susceptibles de pertenecer al desaparecido. Lo que sí se han encontrado son restos de víveres, como barras de pan congelado, que se supone que pertenecen al Sin Querer Dos.