En autobús o en coches particulares los grovenses se desplazaron ayer a Santiago para asistir, en el altar mayor de la catedral compostelana, al funeral por el eterno descanso de Alejandro Barral Iglesias, el canónigo fallecido el lunes, a la edad de 88 años.

Miembros de las familias Barral y Goday, los historiadores Francisco Meis y Antón Mascato, representantes de la asociación Virgen del Carmen y de la Coral Polifónica grovense, el párroco de San Martiño y el caricaturista Gogue son algunos de los mecos que viajaron a la capital para dar el último adiós al hombre que durante treinta años dirigió el Museo de la Catedral.

Nacido en O Grove el 11 de julio de 1930, Ernesto Benito Alejandro Barral Iglesias fue el responsable de las obras de conservación del patrimonio de la seo compostelana.

En el Arzobispado de Santiago destacaron la trayectoria del meco y respecto al funeral explicaron que estuvo presidido por el obispo auxiliar de Santiago, Jesús Fernández. "Como establece el ritual de exequias con misa por un sacerdote difunto, sobre el féretro se colocaron la casulla y la estola que Alejandro Barral utilizó en su ministerio y el evangeliario", aclaran.

El obispo auxiliar "comenzó su homilía transmitiendo la unión y las oraciones de monseñor Julián Barrio, que estos días participa en Madrid en la asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal".

Una vez finalizados los oficios, el cuerpo de Barral fue enterrado en el claustro de la catedral.