La reconstrucción de la casa rectoral de San Vicente de O Grove está en marcha. El cura párroco, Juan Ventura Martínez Reboeiras, anuncia el inicio de las ansiadas obras, que se hacen realidad con una inversión de unos 240.000 euros procedentes del Arzobispado de Santiago y de lo que el propio párroco pudo recaudar, ya fuera organizando excursiones o bien vendiendo llaveros -una réplica de la moneda de Adro Vello con un coste de siete euros- e incluso un CD de música sacra grabado por él mismo que salió a la calle hace unos días.

Este proyecto obedece a una vieja aspiración del joven y popular cura, pero también de los vecinos mecos, que en los últimos años, precisamente desde la llegada de este sacerdote, han visto como se introducían importantes cambios en el día a día de la parroquia.

Hace ya más de dos años Juan Ventura anunciaba en FARO que su intención era restaurar la casa rectoral, por lo que ya había solicitado los permisos pertinentes tanto al Obispado como a Patrimonio.

"Nuestra intención es convertirlo en un centro de convivencia y campamento para que los jóvenes disfruten en verano, teniendo en cuenta que es una zona preciosa donde se hace la Festa da Malla y al lado de las playas", explicaba.

Y es que ese inmueble se sitúa en la popular Horta do Cura, un lugar en el que ya se promueven acampadas juveniles cada verano para recibir a jóvenes de diferentes parroquias gallegas. "Y lo que queremos es rehabilitar la casa rectoral para que sea su punto de convivencia e intensificar la actividad de los jóvenes de la parroquia", explica el cura.

En estos dos últimos años estuvo trabajando en el proyecto, al igual que en el de ampliación y modernización del cementerio.

Fue en noviembre pasado cuando, de nuevo a través de FARO, se anunciaba que Patrimonio había concedido autorización para construir 22 nuevos panteones en el cementerio parroquial y que el Arzobispado había firmado el decreto que autoriza la reforma de la casa rectoral.

Y se aclaraba que con las obras ahora iniciadas no se trata de adecentar la casa del cura, sino de habilitar locales sociales para uso y disfrute de los parroquianos y a modo de albergue para los jóvenes.

Juan Ventura Martínez Reboeiras anunció el comienzo de los trabajos en las redes sociales. Lo hizo "con alegría e ilusión", explicando que los mismos tienen un plazo de ejecución de dieciocho meses y que "pronto veremos su evolución".