De los diez profesionales que trabajan en el servicio de medicina interna del Hospital Comarcal do Salnés, en los próximos días se marcharán cinco dada la precariedad de contratos laborales, el concurso de traslados y un permiso de maternidad. El servicio quedará con la mitad de los médicos. La situación es denunciada por el sindicato médico CESM-Omega, ya que no está previsto que se incorpore ningún facultativo más en medicina interna.

Los delegados sindicales exponen que este servicio quedará abocado en unas semanas a una situación insostenible. "Esta es la grave preocupación que nos transmiten los compañeros facultativos y la propia responsable del mismo y que creemos que es primordial que llegue a la opinión pública", manifiestan.

Los sindicalistas explican que, por diversas circunstancias, la plantilla de facultativos de medicina interna del centro hospitalario comarcal, que era de 10 profesionales, se ha reducido en los últimos tiempos sin que se haya previsto un recambio y en pocos días quedará solo con 5 médicos.

El caso es que, según denuncian, había dos facultativos que trabajaban de forma precaria, con contratos de guardias, y que han optado por emigrar a otros hospitales y otras comunidades autónomas donde les ofrecen una trayectoria profesional con mejores condiciones y más estable en el medio plazo. A ello se le suma el inminente permiso de maternidad al que deberá acogerse otra médico que, dado su avanzado estado de gestación, no puede desempeñar por más tiempo sus funciones.

Por último, en breve, y como consecuencia de la próxima resolución del concurso de traslados de personal, otros dos facultativos cambiarán de destino y se incorporarán a otros centros hospitalarios. Por contra, no está previsto que en el contexto de los traslados se incorpore ningún profesional al servicio de medicina interna del Hospital Comarcal do Salnés.

CESM-Omega critica que no se haya previsto ninguna incorporación que palie esta situación, que considera crítica. Añade que lo único que puede pasar es empeorar el problema, sobre todo porque se aproxima el período vacacional y no habrá personal para cubrir los períodos de descanso, sin contar con que no se produzcan otras incidencias como bajas por enfermedad o permisos ineludibles que agravarían aún más la precariedad en el servicio.

Los sindicalistas advierten que la drástica reducción de profesionales en medicina interna repercutirá en la merma del nivel de cuidado y la calidad asistencial de los pacientes.

"En esta situación no va a ser posible prestar a nuestros pacientes una prestación sanitaria, no ya de calidad, sino mínimamente adecuada a sus necesidades. No debemos olvidar que este servicio es el que mayor número de camas atiende y el que mayor número de pacientes ingresa, el que más número de interconsultas en urgencias recibe y el que mayor presión asistencial soporta en los turnos de guardia, además de tener una notable demanda de consultas externas", declaran.

Los representantes sindicales añaden que el servicio de medicina interna del Hospital do Salnés ha sido hasta ahora uno de los que mejores estándares asistenciales había conseguido, con una estancia media hospitalario muy por debajo de la media de Galicia y con una demora de atención en consulta mínima.

Desánimo

Para el sindicato médico, "la precariedad en la contratación, el desánimo de los profesionales, el burn-out que supone la gran presión asistencial y el nulo reconocimiento por parte de la Xerencia y el Sergas están obligando a los facultativos, a todo el personal en general, de cualquier categoría, a buscar acomodo en lugares más bonancibles. Sobre todo teniendo en cuenta que el Sergas no ofrece ningún incentivo, no ya económico, sino tan siquiera de reconocimiento de méritos profesionales a los profesionales que se incorporan a destinos de difícil cobertura. Mucho nos tememos que esta situación sea solo el principio de una epidemia que acabará manifestándose con la misma crudeza en otros servicios del Hospital, donde también hay profesionales que se van a trasladar (cirugía, pediatría, urología, etcétera), con las graves consecuencias que eso acarrearía para todos los pacientes y usuarios. Si no se mejoran las condiciones de trabajo, si no se toma en consideración a los profesionales, si no se les trata con dignidad, si no se tiene en cuenta la responsabilidad que asumen, difícilmente estaremos defendiendo el futuro de la sanidad pública".

CESM-Omega plantea que este problema se está planteando antes de la aplicación de la reforma de la Lei de Saúde de Galicia, que implicará la desaparición del área sanitaria do Salnés y reducirá aún más la autonomía y capacidad de gestión y los recursos económicos para la asistencia sanitaria en la comarca.

Los miembros de este sindicato en el área sanitaria do Salnés añaden que "lo más grave y preocupante es la pasividad y desidia que está mostrando la Xerencia Executiva de este Hospital, que no está haciendo nada para buscar una solución a esta situación. Todo lo contrario, lo que hace es detraer recursos profesionales y llevarlos a Pontevedra. Es el caso de un neurólogo, con destino en el Hospital do Salnés, pero que en la práctica se ubica en el Hospital Provincial y que de estar en nuestro centro hospitalario podría participar, al igual que ocurre en el CHOP, en los turnos de guardia de medicina interna, contribuyendo a mejorar la situación de este servicio".