Hace dos semanas desde el Bottlenose Dolphin Research Institute (BDRI) daban cuenta de la localización de una ballena con una red de pesca alrededor de su cabeza, frente a la ría de Arousa. Era un rorcual común localizado por el equipo de investigación que dirige Bruno Díaz, quien explicaba entonces que las poblaciones de delfines mulares siguen en aumento en el conjunto de las Rías Baixas, donde ahora se detecta también una inusual presencia de otras muchas especies de mamíferos marinos, como delfines comunes, rorcuales, ballenas y calderones.

En base a las explicaciones ofrecidas entonces por el director del BDRI alusivas a la riqueza de estas aguas se concluía que el considerable aumento de visitantes inesperados puede achacarse al incremento de fitoplancton en las rías, que a su vez atrae a diferentes bancos de peces y cefalópodos tras los que llegan mamíferos marinos dispuestos a cazarlos.

Ese aumento de nutrientes y los movimientos de calamares, sardinas y productos semejantes hacia el interior de las rías genera un efecto llamada que arrastra a diferentes cetáceos, y esta puede ser también una de las razones del avistamiento de una ballena azul frente a la costa de Ons en la jornada del miércoles.

Bruno Díaz López insiste ahora en el "considerable aumento de la biodiversidad" registrado en las Rías Baixas, de ahí que en una sola jornada de observación los tripulantes del barco del BDRI pudieran localizar, por ejemplo, seis especies diferentes de cetáceos.