Un total de 372 conductores dieron positivo en los controles de drogas realizados por la Guardia Civil de Tráfico de Pontevedra en lo que va de año. Los efectivos de la agrupación de Tráfico están distribuidos en cuatro destacamentos (Pontevedra, Vilaboa, O Porriño y Lalín) y realizaron un total de 706 pruebas a conductores que aunque habían dado negativo en las pruebas de alcoholemia, "sí presentaban signos externos de haber ingerido alguna sustancia", apuntan en un comunicado. De estos, 372 (el 53 por ciento del total) dieron positivo.

Por tipos de sustancias detectadas, destaca la cocaína (219 casos), seguida del cannabis (172), los opiáceos, entre ellos la heroína (124), las anfetaminas (41) y las metanfetaminas (34). "De los resultados obtenidos se pone de manifiesto que muchos de los conductores dieron positivo en más de una sustancia a la vez", añade el comunicado de la Guardia Civil.

En Tráfico añaden que "las pruebas de alcohol y drogas se han realizado tanto en horario nocturno como diurno con el fin de que los controles fueran disuasorios para evitar la ingestión de bebidas alcohólicas o drogas". El teniente de la Guardia Civil de Tráfico en Pontevedra, Juan José López Castro ya advirtió a principios de este año que se iban a intensificar mucho los controles de drogas.

Consejos para Navidad

Tráfico anota también una serie de consejos para los conductores de cara a las fiestas de Navidad. El primero es evitar el consumo de alcohol y drogas, puesto que se van a intensificar los controles de estas sustancias "en todo tipo de carreteras y a todos los conductores con el objetivo de disuadirlos de conducir cuando hayan consumido este tipo de sustancias".

A este respecto, la Guardia Civil recuerda que los conductores que han bebido o tomado drogas, incluso en pequeñas cantidades, ven mermadas sus condiciones para manejar un coche al mermarse la atención o las capacidades visual y auditiva, al tiempo que aumenta el cansancio y la fatiga muscular.

La Guardia Civil plantea que "uno de sus objetivos primordiales es procurar que ningún conductor que se vea mermado en sus facultades para conducir pueda hacerlo", y añade que en eso también "es importante la colaboración de los familiares y amigos".

La sanción por conducir bajo los efectos de drogas es de 1.000 euros, y supone también la pérdida de seis puntos del carné de conducir. Pero los hechos incluso podrían ser tipificados como delito, dependiendo de la sintomatología que presente el conductor o si se ve implicado en un accidente.